“El envejecimiento supone una amenaza para el sistema sanitario español”

“La sociedad se comporta como si la sanidad fuera un recurso inagotable”, afirman en el Libro Blanco. ¿Estamos mal acostumbrados?

Es justo lo que se quiere decir. Una de las recomendaciones finales indica la necesidad de reforzar la educación e información sanitaria a todos los niveles como medida fundamental de prevención.

¿Cómo podemos afrontar el creciente envejecimiento de la población en un sistema en la actualidad insostenible?

El envejecimiento de la población no es corregible y debemos estar muy satisfechos del espectacular aumento de la esperanza media de vida de nuestra población. No obstante, el envejecimiento supone una amenaza para el sistema sanitario español. Como este hecho no puede modificarse, resulta necesario ahorrar en otras partidas para que no perjudique al sistema en su totalidad.

¿El copago sería una solución?

El documento revela que es imprescindible extender el copago en las prestaciones farmacéuticas, con una definición previa de las excepciones necesarias relacionadas con los niveles de renta y especificidad de la enfermedad. Además, se reflexiona sobre la posibilidad de que la implantación del copago exija crear una estructura burocrática que probablemente haría inviable económicamente el sistema.

En el texto señalan que el problema de la sostenibilidad del sistema es invisible para el público debido a su prestigio. ¿Se ha convertido en víctima de su éxito?

El peligro existe si no se tienen en cuenta las amenazas que lo acechan. Según una de las recomendaciones, el Consejo Interterritorial de Salud debe recuperar las funciones para las que fue creado, y que sus acuerdos tengan carácter vinculante.

¿Es preocupante el denominado ‘turismo sanitario’?

Esta es una cuestión de la que el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad ya se ha ocupado. Impulsado por España, el Parlamento Europeo ha establecido una norma según la cual los europeos que soliciten asistencia en otro país sólo tendrán derecho a la misma que recibirían en su país de origen.

El Libro Blanco repasa los hitos pasados de nuestro sistema. ¿Cuál resaltaría sobre los demás?

El Informe Abril (1991), que presentó 64 recomendaciones. Aunque no fueron aplicadas por el Gobierno, algunas propuestas sí fueron recogidas por varias comunidades autónomas. Este documento ya apuntaba los aspectos que debían ser corregidos.

¿En qué punto se encuentra el proyecto europeo de salud pública?

Europa no tiene una posición unitaria porque el sistema sanitario en los diversos países es muy distinto. La Academia Europea de Ciencias y Artes envió un documento al Parlamento Europeo titulado Salud es riqueza. Nosotros hemos mandado la contribución española para que la Academia informe al Parlamento sobre nuestras soluciones respecto al problema común de la sostenibilidad.

¿La sociedad española podría tener un sistema sanitario diferente al actual?

El nivel de satisfacción de la sociedad española con el sistema sanitario actual es muy alto y por tanto, no es ni conveniente ni necesario cambiarlo. Lo que hay que asegurar es su sostenibilidad y corregir los defectos que se mencionan en el Libro Blanco.