Esta investigación cuestiona la hipótesis de que las alas de las aves se desarrollaron como estructuras completamente independientes de las extremidades posteriores por las presiones selectivas del vuelo. Según este nuevo estudio, basado en un patrón evolutivo compartido a partir de los dinosaurios, su evolución estaría condicionada por las restricciones del desarrollo embrionario.
Un estudio revela que el entorno de estos cuerpos celestes influye en la capacidad que tienen para crear estrellas, además de poseer características estructurales muy diferentes entre sí, en función de si están acompañadas o aisladas. Un ejemplo cercano es la Vía Láctea, que se encuentra en un triplete de galaxias masivas junto con Andrómeda y la galaxia Triángulo.
Una nueva investigación sugiere que los vínculos entre las chimpancés y sus crías siguen dinámicas parecidas a la de los humanos. Este hallazgo amplía el entendimiento sobre las relaciones de apego en primates.