El gran cordón nervioso que recorre cada brazo de los cefalópodos está separado en segmentos, lo que les permite controlar con precisión los movimientos y crear un mapa espacial de sus ventosas.
Un equipo del Centro de Regulación Genómica de Barcelona ha desarrollado una técnica que combina datos de la secuencia y la estructura de las proteínas para esclarecer cómo unas especies se relacionan con otras en el árbol de la vida. El hallazgo ayudará también a rastrear nuevas amenazas infecciosas y a diseñar mejores terapias.
La NASA, en colaboración con Firefly Aerospace y SpaceX, ha lanzado una misión con el objetivo de explorar nuestro el satélite. El proyecto incluye diez instrumentos científicos y tecnológicos, en apoyo al programa Artemis, que pretende establecer una presencia humana permanente en la próxima década.