Un estudio en el que participa la Universidad de Málaga ofrece herramientas genómicas para mejorar la producción de lenguados en cautividad.
Un equipo internacional de científicos, en el que participa la Universidad de Granada, ha demostrado por primera vez que la anatomía del cerebro de los pacientes con esquizofrenia es diferente en función del tipo que padezcan. El hallazago puede ayudar a mejorar el diagnóstico y el tratamiento de esta enfermedad.
Un arqueólogo del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana de Burgos ha dirigido un estudio sobre una obra de arte paleolítica que contiene representaciones femeninas, asociada a las ocupaciones magdalenienses (hace 17.500 años). Se trata de un gran bloque de caliza con grabados en sus dos caras, que fue encontrado en la cueva vizcaína de Arlanpe en 2011.
Los humanos modernos tenemos una cara más pequeña, en relación al neurocráneo, que la de los restantes miembros del género Homo. Investigadores de la Universidad de Málaga han comparado patrones morfológicos en el cráneo de grandes simios, poblaciones humanas y homininos fósiles, para trazar la evolución del rostro.
El trastorno por déficit de atención e hiperactividad o TDAH afecta a casi el 7% de la población general, pero esta cifra se dispara hasta el 30% dentro de las cárceles. Así lo apunta una investigación con 143 internos examinados por investigadores de la Universidad de Oviedo. Su conclusión es que el diagnóstico y el tratamiento del TDAH en la infancia reducirían las conductas delictivas que conllevan al ingreso en prisión.
Un equipo del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas ha descubierto los mecanismos moleculares que condicionan la predisposición al cáncer de los pacientes con anemia Diamond-Blackfan. Los investigadores han creado el primer modelo animal que contiene las características clave de este tipo de anemia en humanos, incluida la alta susceptibilidad al cáncer. El hallazgo podría ayudar a mejorar los tratamientos de esta enfermedad.
En la actualidad coexisten congresos en los que se estimula el uso de redes sociales con otros eventos en los que se prohíbe explícitamente a los asistentes la divulgación a través de Twitter o Facebook de resultados, salvo expreso consentimiento de los autores.
Un estudio en el que han participado más de 4.000 adolescentes revela que el 24% presenta riesgo de ejercer abuso de género, daño que alguno ya ha ejercido en forma de control y otros abusos. Estos chicos, con niveles de autoestima más bajos que el resto, se identifican con un modelo sexista de dominio y sumisión característico de la violencia de género.