Científicos de la Universidad de Copenhague, liderados por el español Guillermo Montoya, han descrito cómo funciona una de las tecnologías CRISPR, denominada Cas12a, a nivel molecular. Este avance permitirá afinar el proceso de edición genética para lograr solo los efectos deseados.
Un equipo científico chino asegura haber creado los primeros bebés modificados genéticamente con la herramienta CRISPR. Los investigadores habrían utilizado esta técnica en dos gemelas para eliminar el gen CCR5 con el objetivo de hacerlas resistentes al VIH, la viruela y el cólera. Los resultados no se han podido comprobar porque no han sido publicados en ninguna revista científica.
Las terapias génicas basadas en CRISPR para curar enfermedades todavía tardarán en llegar. Quizás no sea este el titular que quisiéramos leer, pero es el mensaje que hay que repetir para no generar falsas expectativas sobre esta potente herramienta de corta-pega genético.
Científicos españoles han descrito un nuevo biomarcador en la enfermedad de Alzheimer de origen desconocido, la proteína STIM1, gracias a la técnica CRISPR / Cas9. Hasta ahora no se conocían los efectos de la deficiencia de esta proteína crítica en esta variante, por lo que supone un indicador del estadio del proceso neurodegenerativo.
La Unión Europea ha tomado la decisión de equiparar los organismos editados genéticamente con la tecnología CRISPR a los transgénicos. Esta homologación, y la obligación de seguir procesos complejos y costosos para la aprobación de productos derivados, puede dejar a las pequeñas empresas del sector agronómico europeo fuera del avance científico más importante de las últimas décadas en este campo, que acabará siendo explotado por las grandes multinacionales.
Un estudio internacional liderado por españoles ha desvelado que el origen evolutivo de las extremidades de los vertebrados está en la aleta dorsal de los peces. El trabajo relaciona la evolución con el gen Shh y abre nuevas vías de investigación en la malformación congénita de estas estructuras.
Esta semana dos equipos rivales, líderes en edición genética, han anunciado nuevos bisturís moleculares que diagnostican infecciones de manera rápida y muy sencilla. Uno de los métodos es capaz de apreciar minúsculas cantidades de virus del papiloma humano en una muestra de sangre. El otro es una tira de papel que funciona como un test de embarazo, pero para detectar los virus del zika y el dengue.
La revista Nature ha hecho su selección de las diez personas que han sido claves en la ciencia de 2017, casi todas para bien, aunque algunas de manera negativa. Desde las comunicaciones cuánticas y la edición del genoma hasta la amenaza de una crisis nuclear y el desmantelamiento de las protecciones ambientales en EE UU, la lista cubre los altibajos de la ciencia y los científicos en este año que termina.
Científicos de la Universidad de Copenhague, liderados por el español Guillermo Montoya, están investigando las características de diferentes bisturíes moleculares de CRISPR para tratar de avanzar en lo que llaman la ‘navaja suiza’ de la edición genética. El equipo ha logrado visualizar las estructuras atómicas de las proteínas Cpf1 y Cas9 y ha comprobado sus particularidades a la hora de cortar el ADN, que las hacen idóneas para diferentes usos en el corta-pega genético.