Aumentar la calidad sensorial y nutricional de los productos sin gluten, al tiempo que se reduce su coste, es uno de las principales demandas de las asociaciones de celíacos. Un reto que sólo podrá lograrse si empresas agroalimentarias y centros de investigación trabajan de la mano. Así lo afirma Juan Ignacio Serrano Vela, doctor en Biología y responsable de Investigación y Formación de la Asociación de Celíacos y Sensibles al Gluten de Madrid. Serrano Vela ha participado en la VIII Jornada de Innovación y Tecnología Alimentaria CTIC-CITA & Cajamar, celebrada este mes en Calahorra (La Rioja).
Las carreras populares se han convertido en un fenómeno social. Prueba de ello son los más de 30.000 corredores que participarán este fin de semana en la maratón que acoge la ciudad de Madrid. Entre ellos se encontrará el atleta Marcos Argumosa, quien al ritmo de sus zancadas, correrá por un reto solidario para combatir el cáncer. Pero la suya no es la única carrera en aliarse con la ciencia.
Nacido en un pueblo costero cerca de Roma hace 45 años, el biólogo molecular Luciano Di Croce terminó estableciendo su grupo de investigación en la ciudad de Barcelona. Reparte su tiempo investigando sobre cromatina y cáncer en el Centro de Regulación Genómica, pasando tiempo con su familia, jugando al fútbol con compañeros del Parque de Investigación Biomédica de Barcelona y haciendo modelos de madera de embarcaciones.
Investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid diseñan, en consorcio con otras instituciones nacionales, una nueva herramienta terapéutica de rehabilitación motriz para niños en la que un robot terapeuta social, interactivo y totalmente autónomo capaz de percibir las reacciones del paciente y determinar si hace correctamente sus ejercicios.
Un equipo de investigadores españoles ha diseñado un tipo de microesferas para liberar de forma controlada una molécula capaz de inhibir el crecimiento del glioblastoma y reducir su malignidad. Es la primera vez que se utiliza esta combinación para abordar este tipo de tumor.
En la llanuras donde se sitúa el campus de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Sevilla existían lagunas someras formadas, entre otros, por el desbordamiento de cauces de ríos. Pero este tipo de humedales de llanuras de inundación ya no se conservan. En 2013, la Oficina de Protección Ambiental de la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla) creó un sistema lagunar artificial para entender su funcionamiento, según se muestra en un estudio.
La universidad pública y la privada presentan diferencias en la docencia, la investigación y la transferencia tecnológica. La pública destaca en producción investigadora mientras que la privada lo hace en producción docente. Así lo confirma la edición de 2015 del proyecto U-Ranking que incluye por primera vez a 11 universidades privadas. Las universidades catalanas son las que presentan mejores resultados.
Los centros y universidades españoles han obtenido 32 ayudas Consolidator del Consejo Europeo de Investigación, lo que supone una financiación aproximada de 60 millones de euros. La convocatoria 2014, destinada a proyectos de excelencia de investigadores distinguidos, sitúa a España como cuarto país receptor de ayudas, junto a Países Bajos, detrás de Reino Unido, Alemania y Francia.
Esther Barreiro (Barcelona, 1965) estudió medicina y se especializó en neumología en la Universidad de Barcelona. Después de una temporada en el hospital de referencia de Gerona y de unos años en Canadá, volvió a Barcelona, al Hospital del Mar y al Parque de Investigación Biomédica de Barcelona, donde dirige el grupo de investigación en Mecanismos Moleculares de Predisposición al Cáncer de Pulmón del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas.