En la imagen, un grupo de científicos analiza un pingüino en la Isla Kopaitic (Antártida). / Efe
Una nueva tecnología de vigilancia, desarrollada por la Universidad de Cádiz y basada en modelos matemáticos probados en la Antártida, supone un ahorro tanto en el coste como en el consumo energético y permite un seguimiento de las zonas volcánicas desde cualquier parte del mundo.
En el Polo Norte, el agujero de la capa de ozono no se ha igualado al del Sur, en parte debido al éxito de los esfuerzos internacionales para limitar los productos químicos que lo agotan. Así lo indica un estudio del MIT liderado por Susan Solomon, la química que demostró la relación entre los CFC y el agujero de ozono.
Ballena jorobada en la Antártida. / Wikipedia.
Después de más de 1.500 años congelado en el hielo de la Antártida, el musgo puede revivir y seguir creciendo. Este descubrimiento de investigadores británicos proporciona una nueva visión sobre la supervivencia de la vida en la Tierra.
Los últimos 30 años de la vida de James B. McClintock están dedicados a la investigación de la Antártida. Esta semana ha estado en Valencia para contar parte de esta carrera de fondo que le ha dado “la oportunidad única de presenciar los efectos dramáticos del cambio climático” con sus propios ojos. Por la relevancia de sus estudios, una zona de la costa antártica lleva su nombre. Actualmente es profesor en la Universidad de Alabama en Birmingham (EE UU).
La expedición de Shackleton alcanza el polo sur magnético. / Wearbeard
Se trata de un trineo de viento de cinco metros de largo por 3,5 de ancho y una tienda-casa que lleva siempre encima. / Ramón Larramendi.
Investigadores de la Universidad de Alcalá y de la Universidad de Barcelona han descubierto en la Antártida la primera especie de nemertino que deposita sus huevos y se posa sobre ellos para protegerlos. Cuando se acerca un intruso, lo aleja con su larga 'trompa'.