Un equipo de investigación liderado por la Universidad Autónoma de Barcelona ha realizado hallazgos excepcionales sobre el equipamiento de los arqueros prehistóricos del Neolítico inicial, hace 7.000 años. El uso de madera de olivo y caña y de brea de abedul para la confección de las flechas revela un grado de precisión y dominio técnico.
El hallazgo de tres arcos de madera de hace más de 7.000 años proporciona nuevos datos sobre el rol social de la caza, la especialización y el acceso a los recursos en las primeras sociedades campesinas. Los arcos, recuperados en el yacimiento de La Draga (Banyoles, Girona), son la evidencia más antigua de arquería neolítica en Europa.