Investigadores de la Universidad Autónoma de Barcelona y de EE UU han demostrado que el transporte de calor tiene un comportamiento similar al de un fluido viscoso cuando se estudia a escala nanométrica. El descubrimiento puede ayudar a mejorar el comportamiento térmico en los dispositivos electrónicos.
Científicos estadounidenses vaticinan que en 2100 la temperatura media de nuestro planeta habrá aumentado 3,2 °C. Según sus estimaciones, tan solo hay un 5% de posibilidades de que, como establece el Acuerdo de París, la temperatura de la Tierra no se eleve más de 2 °C a finales de siglo. La rapidez con la que se reduzcan las emisiones de carbono en las distintas actividades económicas será crucial para determinar el calor del futuro.
El cambio climático representa una de las mayores amenazas actuales para la biodiversidad y uno de los grupos animales más afectados por el aumento de la temperatura son los anfibios. Un equipo científico con participación española ha estudiado cómo las olas de calor afectan al tipo de dieta de tres especies de anfibios de la península ibérica: la ranita de San Antonio, la ranita meridional y el sapillo pintojo ibérico.
Una invención para combatir el calor, el aire acondicionado
Investigadores de la Universidad de Valencia y Politécnica de Valencia han encontrado un método para conocer la conductividad térmica de las capas geológicas del subsuelo, localizando las más eficientes en la cesión o absorción de calor. La aplicación del trabajo en el diseño de intercambiadores para bombas de calor, utilizadas en climatización y agua caliente sanitaria, puede ahorrar hasta el 70% de energía consumida respecto a bombas convencionales.
Los captadores solares térmicos pueden tener pérdidas ópticas importantes si no se acompañan de sistemas de seguimiento adecuados. Esta es una de las conclusiones de un estudio realizado por ingenieros de la Universidad Pública de Navarra, que también recomiendan revisar algunos apartados de la normativa española e internacional que regula este ámbito energético.
Un estudio proteómico ha identificado nuevas proteínas claves en la adaptación de las plantas a las altas temperaturas. Este trabajo es clave puesto que en España este fenómeno, junto con la sequía, son los principales factores que influyen en la producción agrícola.
Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid y otros centros internacionales han medido por primera vez la transferencia radiativa de calor entre materiales separados por distancias del orden de un nanómetro. El estudio revela que el intercambio radiativo de calor aumenta dramáticamente a estas escalas y sienta las bases para la descripción y diseño de nuevos dispositivos nanométricos que hagan uso de la radiación térmica.