Muchas personas que buscan un embarazo han sentido preocupación por la vacunación. No hay ninguna evidencia, ni una razón teórica, de que alguna de las vacunas pueda afectar la capacidad reproductiva de mujeres u hombres.
Una investigación ha permitido analizar las características de los casos asintomáticos con covid-19 en España y desarrollar un modelo predictivo del riesgo de infección basado en síntomas para facilitar la detección de casos. El trabajo parte del estudio nacional de seroprevalencia ENE-COVID, coordinado por el Centro Nacional de Epidemiología del Instituto de Salud Carlos III.
Según los resultados de la tercera ronda de la Encuesta de Percepción Social de aspectos científicos de la covid-19, cuatro de cada cinco españoles se vacunarían —o ya lo han hecho— con alguna de las vacunas tan pronto como les fuese posible. El principal obstáculo para quienes desconfían de estos fármacos es la creencia de que no son seguros.
El jurado ha distinguido en esta edición a siete científicos y científicas que han contribuido al desarrollo de algunas de las vacunas aprobadas contra el coronavirus, basadas en tecnologías novedosas como el ARN mensajero y otras estrategias.
Un estudio sobre el uso de vacunas de ARNm en personas residentes de centros de mayores en España concluye que su efectividad ha sido del 71 % frente a la infección sintomática y asintomática por SARS-CoV-2, del 88 % en la prevención de hospitalizaciones y del 97 % en evitar fallecimientos.
Varios estudios muestran que escuchar melodías o tocar un instrumento han aliviado la carga psicológica de la covid-19 a personas de todo el planeta, proporcionándoles tres beneficios difíciles de lograr en meses de confinamientos y crisis mundial: placer, desahogo de emociones negativas y conexión con uno mismo.
Investigadores del CSIC han descrito unos compuestos que inhiben la interacción de la proteína S del SARS-CoV-2 con los receptores celulares y bloquean la entrada del virus en la célula.
El tratamiento de Regeneron, al que recurrió Donald Trump, ha demostrado su eficacia en los pacientes incapaces de desarrollar sus propios anticuerpos, pero esta es pequeña. Además, se trata de un fármaco caro que solo beneficiará a un mínimo número de personas en los países en los que la población vulnerable ya ha sido vacunada.
Las vacunas de la covid-19 son seguras. Sin embargo, algunas personas desarrollan efectos secundarios, generalmente leves, como dolores musculares y articulares, fiebre y cansancio, que solo duran unos pocos días. En caso de contagio entre dosis, si la persona es menor de 65 años deberá esperar seis meses para recibir el segundo pinchazo. Si es mayor, completará la pauta de vacunación una vez recuperado de la enfermedad.