Investigadores de la Universidad de Cádiz han desarrollado un sistema que mide con datos exactos cuánto carburante utiliza un navío durante una ruta marítima y los gases nocivos para la salud que expulsa a la atmósfera. El método permitirá conocer minuto a minuto estas variables e identificar de manera inmediata cualquier anomalía.
Los ríos intermitentes se secan durante una parte del ciclo anual y suponen la mitad de la red mundial de ríos. Pero no se tienen en cuenta para determinar la contribución global de los afluentes en la liberación de dióxido de carbono a la atmósfera. Un estudio ha permitido cuantificar por primera vez esas emisiones y revela que, si se añadiera la información referente a los ríos intermitentes, las estimaciones de emisiones de CO2 asociadas a los cursos de agua aumentarían entre un 7% y un 152%.
Investigadores de la Universidad de Cádiz han comprobado que la potencia de los motores de los barcos, especialmente durante las maniobras próximas al puerto, es una variable indispensable para conocer la cantidad de gases perjudiciales vertidos a la atmósfera. Los expertos consideran que habría que incluir este parámetro en los inventarios de emisiones publicados a nivel mundial.
Un equipo de la Universidad Politecnica de Valencia ha diseñado un nuevo sistema que ayuda a reducir las emisiones contaminantes de los motores diésel y el consumo de combustible hasta un 10%. La clave reside en la incorporación de una nueva tecnología que es capaz de recuperar la energía de los gases de escape recirculados del motor.
Para finales de 2017, se prevé que las emisiones mundiales de dióxido de carbono procedentes de los combustibles fósiles y la industria aumentarán aproximadamente un 2% en comparación con el año anterior. Este hecho se produce tras tres años de emisiones relativamente estables, según un informe presentado por el Proyecto Global del Carbono, que coincide con la última semana de negociaciones en la Cumbre del Clima en Bonn (Alemania).
Un estudio de la Universidad de Sevilla afirma que la rentabilidad socioeconómica de la construcción de la red de carriles bici, para el periodo 2006-2032, se situará alrededor del 130%, con un beneficio neto para la ciudad de 550 millones de euros.
Un nuevo método permite evaluar el consumo y las emisiones de los autobuses urbanos de Madrid usando equipos de medida embarcados a bordo y métodos estadísticos de cálculo. El sistema, denominado ECOTRAM, ha sido desarrollado por un equipo de la Universidad Politécnica de Madrid, el Instituto Universitario de Investigación del Automóvil y la Empresa Municipal de Transportes.
Uno de los objetivos del Acuerdo de París aprobado en diciembre de 2015 para luchar contra el cambio climático es que el aumento de la temperatura del planeta en 2100 no supere los 2 ºC, y si es posible los 1,5 ºC respecto a los niveles preindustriales. Un nuevo estudio ha planteado cuatro escenarios futuros de reducción de emisiones de CO2 y aumento de renovables, y ni siquiera en el mejor de los casos se lograría "enfriar" el planeta.
La provincia de Segovia podría compensar las emisiones de gases de efecto invernadero del tráfico rodado en los próximos 35 años por medio de medidas de gestión de usos del suelo, sin causar ningún impacto social ni pérdida de producción agropecuaria. Así lo confirma un trabajo, que centrado en esta provincia, y que ha determinado que las posibilidades de compensación son el doble de la demanda, y que de forma análoga, esta compensación podría ser también viable en otras regiones de España.
En muchos países del mundo aún se utiliza habitualmente la leña y el carbón y otros combustibles sólidos para cocinar, lo que perjudica la calidad del aire interior y exterior. Un nuevo estudio ha analizado la influencia de estas emisiones en la salud humana y en el clima, y concluye que la eliminación gradual de este tipo de cocción evitaría la muerte de 22,5 millones de personas hasta 2100 y ayudaría a reducir las temperaturas globales.