Ilustración de Duvalius abyssimus. / Sinc - José Antonio Peñas.
El peculiar hábitat de la cueva de Kruber en el Cáucaso occidental continúa siendo un misterio. Investigadores de dos universidades españolas han descubierto en esta sima una nueva especie de escarabajo de los abismos.
Hoy Darwin cumpliría 205 años, y coincidiendo con la fecha de su nacimiento, investigadores de la Universidad de Tennessee en Chattanooga (EE UU) han publicado en la revista ZooKeys la descripción de una nueva especie de escarabajo que el naturalista inglés descubrió hace 180 años en Bahía Blanca, Argentina. El ejemplar se encontraba entre los fondos del Museo de Historia Natural de Londres.
Miguel A. Alonso Zarazaga, del Museo Nacional de Ciencias Naturales, descubrió un nuevo género de coleóptero en las islas Canarias denominado Moreiba. "El género es una de las categorías taxonómicas más resolutiva, y a su nivel equivalente a la de phyla. Es un tipo de diferencia taxonómica que suele ser equivalente en diferentes grupos de organismos", añade Valdecasas. / Miguel A. Alonso Zarazaga.
El investigador Miguel A. Alonso Zarazaga, del Museo Nacional de Ciencias Naturales, ha descubierto un nuevo género de coleóptero en las islas Canarias, que ha denominado Moreiba. Estos escarabajos se incluyen dentro de la familia de los gorgojos, un grupo que causa numerosas plagas en los cultivos.
Las estrellas de la Vía Láctea sirven de referencia a los escarabajos peloteros para transportar sus pelotas de estiércol en línea recta. Una investigación internacional, que publica la revista Current Biology, demuestra por primera vez esta capacidad de orientación en los insectos.
Las hembras del escarabajo castaño de la harina (Tribolium castaneum) sometidas a una baja diversidad genética tienen más parejas sexuales, lo que aumenta su éxito reproductivo. Los expertos todavía no han averiguado el mecanismo causante de este cambio.
Ejemplar hembra de Hydraena diazi localizadaenel Valle de Arán (Lleida).
Una pequeña pieza de ámbar expuesta en una feria geológica que se celebró en Vitoria-Gasteiz hace dos años despertó el interés del científico Vicente Ortuño, de la Universidad de Alcalá (UAH). El ámbar albergaba en su interior un escarabajo del género Calathus, una especie hasta ahora desconocida que vivió hace 40 millones de años, la más antigua conocida hasta la fecha. Sus descendientes más cercanos siguen vivos hoy.