Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha identificado en la Cueva de La Fragua (Santoña, Cantabria) los restos fósiles de una foca monje, un mamífero marino que está en la actualidad en peligro de extinción y que se asocia a las aguas templadas del Mediterráneo o el Atlántico más tropical. Es la primera vez que se identifica esta especie en la Prehistoria de la Cornisa Cantábrica. El hueso ya forma parte de las colecciones del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria.
La investigación recientemente publicada en la revista “Palaeogeography, Palaeoclimatology, Palaeoecology” sobre el paleolago que existió hace 10 millones de años en la localidad de Bicorb (Valencia), ha desvelado que las aguas de este medio eran salinas y ha establecido la cadena trófica del lago, donde el depredador ha resultado ser una nueva especie de pez, bautizada por los investigadores como Aphanius bicorbensis, dedicando el descubrimiento a la población de Bicorb.
Reconstrucción artística de Inkayacu paracasensis.
Descubierto hace siete años en el yacimiento de las Hoyas (Cuenca), Concavenator corcovatus es un nuevo dinosaurio carnívoro que Francisco Ortega, Fernando Escaso y José Luis Sanz describen hoy en la revista Nature. Un esqueleto “exquisitamente preservado del Cretácico Inferior que representa un nuevo género y especie de carcarodontosáurido”. SINC habla con el primer autor e investigador de la UNED sobre el hallazgo de este terópodo de seis metros, uno de los más completos de Europa.
Zeresenay Alemseged, líder del proyecto, excavando un fósil de 3,4 millones de años.
Pakasuchus kapilimai, que no era más grande que un gato y que vivió durante el Cretácico medio en Tanzania, tenía características inusuales para un cocodrilo, un ejemplo de ello son sus dientes.
Los cocodrilos del Cretácico (Pakasuchus kapilimai) tenían una dentadura similar a la de los mamíferos y una columna inusualmente flexible, y cazaban libélulas en una antigua planicie aluvial de Tanzania.
Un equipo internacional de investigadores, con participación española, ha descubierto la serpiente fósil del género Vipera de mayor tamaño conocido hasta ahora en Europa. Los científicos, que señalan que podría superar los dos metros de longitud, la consideran como el mayor depredador de la isla de Mallorca del Plioceno inferior (hace entre 5,3 y 3,4 millones de años).
Paleontólogos de los Museos de Historia Natural de Roterdam, París, Pisa, Lima y Bruselas y de la Universidad de Utrech han participado en el descubrimiento y la descripción del Leviatán Melvillei, una ballena de presa del Mioceno con dientes gigantescos. La descripción científica oficial de esta nueva especie (extinta) con los dientes más grandes jamás hallados se publica hoy en la revista Nature.