Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha reconstruido, a través de huesos y dientes fósiles, el régimen alimentario de dos roedores de más de un kilogramo de peso que habitaron Tenerife y Gran Canaria hace más de 2.000 años. El aumento de tamaño respecto a las especies peninsulares se debió a la adaptación a una dieta vegetariana no herbácea.
Un estudio internacional, con participación española, ha demostrado que los cambios evolutivos en la morfología de los dientes de los caballos se deben a modificaciones previas en la alimentación. Los resultados confirman que el registro fósil de los dientes es clave para entender la selección natural de Darwin y los cambios climáticos del pasado.
Reconstrucción del fósil encontrado. Imagen: Jianni Liu.
Un equipo científico ha reconstruido una de las palmeras más antiguas que se conocen, la especie Sabalites longirhachis, muy cercana al origen del grupo de las palmeras en el Cretácico superior.
La especie Alavesia daura hallada en Namibia.
Un equipo internacional de científicos ha hallado una rara especie de mosca del género Alavesia, en un área remota del noroeste del desierto de Namibia. Pero este insecto ya era conocido por investigadores españoles. En 1999 los restos fósiles de unos 110 millones de años de antigüedad de dos especies de este mismo género aparecieron en ámbar en Álava y Asturias. El macizo montañoso Brandberg en el país africano parece ser el refugio de seres primitivos.
Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha identificado en la Cueva de La Fragua (Santoña, Cantabria) los restos fósiles de una foca monje, un mamífero marino que está en la actualidad en peligro de extinción y que se asocia a las aguas templadas del Mediterráneo o el Atlántico más tropical. Es la primera vez que se identifica esta especie en la Prehistoria de la Cornisa Cantábrica. El hueso ya forma parte de las colecciones del Museo de Prehistoria y Arqueología de Cantabria.
La investigación recientemente publicada en la revista “Palaeogeography, Palaeoclimatology, Palaeoecology” sobre el paleolago que existió hace 10 millones de años en la localidad de Bicorb (Valencia), ha desvelado que las aguas de este medio eran salinas y ha establecido la cadena trófica del lago, donde el depredador ha resultado ser una nueva especie de pez, bautizada por los investigadores como Aphanius bicorbensis, dedicando el descubrimiento a la población de Bicorb.
Reconstrucción artística de Inkayacu paracasensis.