Entre 37 candidaturas, el Consejo de Ministros ha confirmado hoy que finalmente Sevilla será la que acoja la sede de la Agencia Espacial Española (AEE), mientras que la Agencia de Supervisión de Inteligencia Artificial (AESIA) estará en A Coruña. Se abre así el proceso de descentralizacion de nuevos organismos por el que apuesta el Gobierno.
La empresa DeepMind, propiedad Google, ha desarrollado un programa de IA que ha aprendido a jugar a Stratego por primera vez. Este juego plantea grandes desafíos debido a la cantidad de incertidumbre a la que se enfrenta el usuario, comparable al póker. Su dominio plantea nuevas posibilidades en aplicaciones como la gestión del tráfico.
La presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, preside este lunes un acto en el que se dan a conocer los cuatro primeros informes de la Oficina C, que versan sobre ciberseguridad, hidrógeno verde como combustible, avances en el tratamiento contra el cáncer e inteligencia artificial y salud.
Los programas informáticos que realizan operaciones comparables a las de la mente humana, como el aprendizaje o el razonamiento lógico, a menudo reflejan los errores y prejuicios que introducen sus creadores. Àtia Cortés, investigadora del Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación advierte sobre el problema y promueve prácticas éticas y responsables en la IA.
La compañía DeepMind, propiedad de Google, con su programa AlphaFold de inteligencia artificial y la colaboración del Instituto Europeo de Bioinformática, logra predecir la forma en 3D de más de 200 millones de proteínas de los organismos de la Tierra. Los resultados se ofrecen en abierto a la comunidad científica para ayudar a investigar los seres vivos y resolver problemas globales como el hambre y las enfermedades.
Concha Monje trabaja en el desarrollo del robot humanoide TEO, al que ahora está implantando innovaciones de robótica blanda para hacerlo más versátil. Además, esta investigadora y profesora de la Universidad Carlos III de Madrid está muy comprometida con la promoción de la visibilidad de la mujer en ciencia y tecnología.
Los científicos Geoffrey Hinton, Yann LeCun, Yoshua Bengio y Demis Hassabis han sido galardonados por sus desarrollos en redes neuronales que imitan el funcionamiento del cerebro humano. Se aplican en campos tan diversos como la robótica, el reconocimiento de voz, la traducción automática de idiomas o la predicción de estructuras proteicas.
Una ‘diadema’ capaz de predecir crisis epilépticas, una enfermera virtual para el seguimiento de pacientes con enfermedades crónicas y una silla de ruedas que pone de pie al usuario en segundos. Estos son algunos de los proyectos tecnológicos de Europa y Latinoamérica que llegaron a la final de los Premios Fundación MAPFRE.
Un equipo del Boston College, en EE UU, ha realizado un análisis detallado de neuroimágenes de personas con trastorno del espectro autista utilizando técnicas de aprendizaje automático. Los investigadores han observado que las diferencias de comportamiento entre individuos con este trastorno están relacionadas con variaciones en la estructura del cerebro.
Hablar de sistemas ‘inteligentes’ que pintan, escriben o hacen música mejor que los humanos no solo es absurdo y profundamente ingenuo, sino también una falta de reconocimiento hacia todas esas personas que diseñan, desarrollan, entrenan, ponen en marcha y mantienen esta tecnología.