La Organización Mundial de la Salud ha presentado hoy los datos de un informe sobre la incidencia global del cáncer: más de 14 millones de nuevos casos y más de 8 millones de fallecimientos relacionados. Además, la institución subraya la importancia de medidas de prevención y control del cáncer de mama y de cuello de útero. Desde 2008 estos casos han aumentado un 20%.
Las personas que consumen siete raciones o más de frutos secos a la semana tienen un 20% menos de probabilidades de morir por enfermedades cardiovasculares, cáncer y afecciones respiratorias. Así lo afirma un estudio estadounidense que ha incluido los datos de 118.962 personas sanas durante 30 años.
Una reducción del 40% en los viajes de larga duración en coche, sustituyéndolos por viajes en transporte público y en bicicleta, se traduce en un descenso anual de 127 casos de diabetes, 45 de enfermedades cardiovasculares, 30 de demencia, 16 heridos leves, 0,14 lesiones graves, 11 de cáncer de mama y 3 de cáncer de colon.
Un estudio europeo ha analizado la relación entre el consumo de frutas y verduras y el riesgo de mortalidad sobre 451.151 individuos durante más de 13 años. Este trabajo, "el estudio epidemiológico más importante que analiza esta asociación", concluye que comer estos alimentos reduce la mortalidad, especialmente por enfermedad cardiovascular.
La Unidad de Investigación Clínica del Instituto de Investigación del Hospital 12 de Octubre i+12 ha creado una escala matemática para predecir el riesgo de mortalidad de los pacientes con insuficiencia cardiaca durante el primer año tras el diagnóstico.
Los pacientes con un buen control de la infección por VIH tienen el mismo riesgo de mortalidad que la población general. Así lo asegura una investigación, publicada en la revista AIDS, que destaca la importancia de un diagnóstico rápido de la enfermedad y un inicio temprano del tratamiento antirretroviral.
Las enfermedades del sistema circulatorio, los tumores y las afecciones respiratorias fueron, por este orden, las principales causa de muerte en España en 2011, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que sitúa la tasa bruta de mortalidad en 841 fallecidos por cada 100.000 habitantes, lo que supone un aumento del 1,4% con respecto al año anterior. Uno de los incrementos más espectaculares ha sido el de las muertes por alzhéimer, que se duplicó entre 2000 y 2011.
Investigadores del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas han analizado las muertes causadas por infarto de miocardio y han observado una marcada tendencia decreciente. Los resultados muestran un descenso de la mortalidad a corto plazo en ambos sexos, sobre todo entre las mujeres.
Dejar de fumar antes de la treintena permite vivir un decenio más. La revista The Lancet publica un estudio realizado durante 12 años años sobre más de un millón de mujeres que demuestra que la cantidad de cigarrillos, la edad a la que se empieza a fumar y el momento en que se deja condicionan la esperanza de vida.
Un estudio con participación del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC) concluye que existen mecanismos estabilizadores que contribuyen a la resiliencia de la vegetación frente a cambios climáticos extremos, aunque también señala que no debe subestimarse la capacidad de tales eventos para provocar cambios dramáticos, especialmente si se vuelven más constantes.