Investigadores de varias instituciones de Valencia han desarrollado un método para mejorar la selección de pacientes con insuficiencia cardiaca que han de ser sometidos a terapia de resincronización cardiaca. El equipo ha realizado un estudio retrospectivo mediante un nuevo marcador eléctrico –obtenido de valores extraídos del análisis espectral del electrocardiograma– con el objetivo de medir su energía antes de realizar la intervención.