En las regiones internas de nuestra galaxia también hay materia oscura, según un estudio de investigadores latinoamericanos y europeos. Aunque los modelos teóricos predecían su existencia y se había logrado medir en otros lugares del universo, por primera vez se han encontrado evidencias de la presencia de esta materia que no interacciona con la luz en el interior de la Vía Láctea.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid y el Instituto de Astrofísica de Canarias han analizado la evolución y composición de cerca de 3.000 galaxias cercanas con los datos del telescopio espacial Spitzer. Los resultados han permitido publicar nuevas imágenes ópticas de más de la mitad de ellas, además de aportar un estudio estadístico de su morfología, composición e interacciones.
Las supernovas o explosiones de estrellas que emiten rayos gamma expulsan más cantidades de niquel que el resto. Es una de las conclusiones del estudio simultaneo de tres fenómenos de este tipo analizados por un equipo internacional de científicos, con participación de la Universidad del País Vasco y el CSIC.
Un equipo formado por investigadores de la Universidad de Barcelona y el Imperial College de Londres ha realizado, por primera vez, mediciones astronómicas de la distancia estándar del universo a partir de datos observacionales. Hasta ahora se utilizaban cálculos relacionados con la relatividad general.
España entró en la carrera espacial gracias al INTASAT. / SINC
Los cuásares lejanos suelen ser muy energéticos, de rápida evolución y asociados a las grandes fusiones de galaxias, pero existe otra población que evoluciona lentamente. Investigadores del Instituto de Astrofísica de Andalucía (IAA-CSIC) han logrado por primera vez datos espectroscópicos de estos cuásares distantes y poco luminosos con la calidad necesaria para determinar sus parámetros esenciales.
Laniakea. En el punto rojo se encuentra la Tierra. / Nature
Las estrellas masivas y luminosas de primera generación del universo podría formar un grupo o clúster. / National Astronomical Observatory of Japan
Mosaico de imágenes captadas por el Wide Field Imager (WFI). / ESO