Un grupo de científicos españoles investiga cómo muta el VIH en los más pequeños para conseguir nuevos antivirales con más vida media y tratamientos personalizados. Solo en la actualidad hay más de 24 millones de personas afectadas en el mundo y 3 millones de ellos son niños.
Investigadores de EE UU han estudiado durante cinco años la forma en la que un paciente infectado por VIH producía anticuerpos neutralizantes del virus. El objetivo: obtener nuevas pistas sobre cómo activar la respuesta inmunitaria. Al mismo tiempo, han desarrollado un imitador sintético de envoltura externa del patógeno con potencial para inducir los anticuerpos mediante una vacuna.
Científicos del Instituto de Investigación del Sida Irsicaixa, en Barcelona, han publicado los resultados de un ensayo clínico en el que cinco enfermos de VIH han logrado que su sistema inmunitario controle el avance del virus durante varias semanas gracias a una vacuna y sin necesidad de tomar ningún fármaco retroviral. El ensayo se ha presentado durante la Conferencia sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas celebrada en Seattle (EE UU).
Investigadores de EE UU han descubierto que algunas células de la mucosa del sistema reproductor y del tracto intestinal ayudan a que el virus del VIH llegue hasta las células inmunes, aumentando su capacidad de infección. Entender el papel que juegan estas células en la transmisión del virus puede conducir al descubrimiento de nuevos métodos de prevención, según los autores.
Un nuevo dispositivo, probado con suero humano y patentado por el CSIC, permite detectar el VIH tan solo una semana después del contagio y obtener los resultados clínicos en menos de cinco horas. La detección temprana es clave para optimizar la eficacia de los antirretrovirales y prevenir la propagación de la enfermedad.
En el torrente sanguíneo, cuando el VIH se acerca a una célula para infectarla, tiene que fusionar su membrana con la cubierta sana de esta para introducir su material genético y propagar la infección. Un equipo de investigadores en el que participa la Universidad Complutense de Madrid ha descubierto que alterar la estructura de esta membrana podría ser clave para bloquear el contagio, lo que abre la puerta al diseño de nuevas armas contra la expansión del virus.
Una pauta triple basada en un inhibidor de la integrasa disminuye la carga viral en semen de forma muy rápida, reduciendo el riesgo de transmisión. Así concluye un nuevo estudio, liderado por investigadores catalanes, que revela la capacidad potencial de estos nuevos tratamientos para disminuir las posibilidades de contagio por vía sexual.
El VIH-1, causante de la mayoría de infecciones por el virus del sida en el mundo, saltó desde el Caribe a Nueva York alrededor de 1970, lo que provocó la pandemia posterior. Así concluye un estudio que incorpora análisis históricos y genómicos y aclara el error en la identificación del hombre conocido como 'paciente cero'.