Investigadores del centro CiQUS de la Universidad de Santiago de Compostela han creado un material sensor que actúa como un teclado molecular. Está basado en el conflicto quiral, un efecto apenas descrito en química de polímeros, y su 'música' o respuesta quiro-óptica informa sobre diversos estímulos, como la presencia de cationes metálicos en una disolución.
Los investigadores John B. Goodenough, M. Stanley Whittingham y Akira Yoshino han sido los galardonados este año con el Premio Nobel de Química por el desarrollo de baterías de iones de litio. Estas baterías ligeras, recargables y potentes se usan en la actualidad en todo, desde los teléfonos móviles hasta los ordenadores portátiles y los coches eléctricos.
Nanorrobots que se inyectan en la sangre, materiales que se autorreparan o sistemas de almacenamiento de información sin límites podrían ser posibles gracias a máquinas moleculares. El químico francés Jean-Pierre Sauvage, que ha sido uno de los ponentes esta semana en el festival Passion For Knowledge en San Sebastián, logró diseñar, junto a su equipo, estos diminutos artefactos con múltiples aplicaciones.
El premio Nobel de Química Jacques Dubochet (Suiza, 1942) participó en una sesión sobre ciencia y política en el XI Congreso Mundial de Periodismo Científico, que se celebró este verano en la ciudad suiza de Lausana. Aparte de investigador, es miembro del Partido Socialista suizo desde hace años. Siempre ha sido un verso libre. Conversó con agencia Sinc sin tapujos, en una entrevista improvisada.