Los láseres ya forman parte de la vida cotidiana de los ciudadanos, pero además pueden ser claves para desentrañar los secretos de la materia, según el catedrático Luis Bañares (Madrid, 1962), del departamento de Química Física I de la Universidad Complutense de Madrid. Recientemente el profesor ha dirigido, junto a su compañero Francisco Javier Aoiz, el curso de verano Los láseres en el siglo XXI, organizado por esta universidad en San Lorenzo de El Escorial, y al que han acudido expertos en láseres de todo el mundo.
Los científicos creen haber encontrado un método viable para reducir los niveles de CO2 en la atmósfera: añadir cal al agua del mar. Este procedimiento tendría el potencial de revertir drásticamente la acumulación de CO2 en la atmósfera a los niveles anteriores a la revolución industrial, según publica la revista Chemistry & Industry.
Un análisis de billetes de euro españoles seleccionados al azar por químicos de la Universidad de Valencia (UV) ha revelado que contenían una concentración media de 155 microgramos de cocaína, lo que supone la tasa más alta de Europa, según publican en el último volumen de la revista Trends in Analytical Chemistry. Los investigadores han realizado un estudio comparativo de los métodos empleados en la actualidad para determinar la presencia de cocaína en los billetes del mundo.
En la gráfica se puede observar la concentración de cocaína en los billetes de diferentes paises.
“La historia del descubrimiento del wolframio podría servir para el guión de una buena película de intriga. Se produjo por circunstancias fortuitas, después de que fracasara un programa de espionaje del Ministerio de la Marina”. Así resume el hallazgo de este metal, aislado en 1783 por Juan José y Fausto Delhuyar, Pascual Román Polo, catedrático de Química Inorgánica de la Facultad de Ciencia y Tecnología de la Universidad del País Vasco y presidente del Grupo Especializado Química, Historia y Sociedad, perteneciente a la Real Sociedad Española de Química.
Gracias al trabajo de más de 45 doctores, 11 de ellos catedráticos, y más de 30 licenciados, en la memoria de 2007 se contabilizó la participación del IUMA en más de 60 proyectos públicos y privados de ámbito regional, nacional y europeo, unos 90 artículos publicados, 14 libros y el registro de dos patentes, además de la participación y organización de congresos y seminarios. Director desde hace año y medio, Cazorla es catedrático del Departamento de Química Inorgánica e investigador del grupo de Materiales Carbonosos y Medio Ambiente. Trabaja en temas de tanto interés como la eliminación de contaminantes, la captura de CO2 o el almacenamiento de energía.
El profesor de la Universitat de València Miguel Julve Olcina ha sido galardonado con el prestigioso Premio Catalan-Sabatier 2008 de la Société Française de Chimie, por sus contribuciones científicas en el campo de la llamada química de coordinación y en el del magnetismo molecular.
Un total de 209 trabajos participan en “Ensaya’08”, el IV Certamen “Teresa Pinillos” de ensayos de divulgación científica y humanística. El certamen, organizado por la asociación Nexociencia, en colaboración con la Universidad de La Rioja, tiene como objetivo principal facilitar la comprensión pública de la ciencia e incentivar el uso del español como vehículo de comunicación científica.
Científicos de la Universidad de Santiago de Compostela (USC) y del Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC han analizado 41 productos comerciales que incluyen gambas o langostinos, y los resultados revelan que el 24,4% de las etiquetas indican erróneamente el nombre de la especie, y en un 39% la información es incompleta. Los investigadores han patentado un método molecular que permite distinguir las especies de este tipo de mariscos por su ADN mitocondrial.
España ha logrado reducir un 1,7% las emisiones de gases de efecto invernadero en 2006 (el equivalente a 7,5 millones de toneladas de CO2) pero se mantiene como el quinto país más contaminante de la Unión Europea, según el informe anual presentado hoy por la Agencia Europea del Medio Ambiente. En relación al Protocolo de Kyoto, España acumula, desde 1990, un incremento del 49,5% de los niveles permitidos.