Narciso Soto (18 años), que ha ideado un bastón electrónico para invidentes ha sido el ganador de la tercera edición del certamen Innovaciencia, organizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología. El segundo premio ha estado compartido por Susana Niclós (23 años), con su red de enchufes programables controlados por internet, y Carlos Andrés Martínez Casais (25), con un transmisor/cargador inalámbrico para múltiples dispositivos.
Científicos de la Universidad de Alicante han desarrollado un sistema de control de alto nivel que permite el vuelo autónomo de drones. Gracias a esta tecnología, incorporada en una placa de control, el vehículo puede alternar entre distintos planes de vuelo o definir los desplazamientos óptimos en función del entorno y la información recibida por sus sensores. Además, el dron incorpora un mecanismo de comunicación con tierra que permite establecer nuevos planes de vuelo mientras la aeronave está en movimiento.
Iván Pérez, consejero delegado de Geo.band, y Paco Lobatón en la sede de la fundación QSD Global de personas desaparecidas. / Olmo Calvo / Sinc
Geo.band es un localizador GPS con una pantalla de 1,3 pulgadas. Mediante la aplicación instalada en un móvil o una tableta, se puede hacer un seguimiento en tiempo real tanto de personas como de mascotas y objetos. / Olmo Calvo / Sinc
El servicio permite una localización en tiempo real en un mapa o sobre imágenes reales del lugar. / Geo.band
El geologalizador con distintos adaptadores. / Olmo Calvo / Sinc
El rescate de una niña con autismo, que se había escapado de casa, movió al ingeniero informático Iván Pérez a desarrollar, junto a su equipo de la empresa Geo.band, un geolocalizador de última generación que se puede convertir en un llavero, un colgante o un reloj. Está diseñado para ser usado con niños, ancianos y personas dependientes e incluye sensores y algoritmos que aprenden del usuario. Paco Lobatón se ha comprometido con el proyecto a través de su fundación QSDGlobal.
El fundador y consejero delegado de Mind the Byte, Alfons Nonell-Canals (en el centro), durante la presetnación de la campaña. / Jordi Cabanas/ Mind the Byte
Un diagrama esquemático que muestra la formación de hidróxido de litio (LiOH) en el electrodo de grafeno en la descarga de una batería no acuosa de oxígeno de litio en presencia del mediador redox, yoduro de litio, y trazas de agua. / Tao Liu, Gabriella Bocchetti y Clare P. Grey
Utilizando una combinación única de materiales, investigadores de la Universidad de Cambridge (Reino Unido) han desarrollado un prototipo de batería de litio-aire que se puede recargar más de 2.000 veces. Su alta densidad energética es comparable a la de la gasolina y permitiría que un coche eléctrico fuese de Londres a Edimburgo con una sola carga, o alargar durante días el uso de un smartphone sin recargarlo.