La Asociación Trashumancia y Naturaleza, el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, en Panamá y el periodista Javier Gregori han sido galardonados con los premios a la Conservación de la Biodiversidad de la Fundación BBVA.
Dos actuaciones que abordan problemas globales de gran calado, como la desaparición de los anfibios y los cambios en los usos ganaderos, son las galardonadas en esta edición de los Premios Fundación BBVA a la Conservación de la Biodiversidad, que se han entregado ayer en la sede de la Fundación BBVA en Madrid.
La Asociación Trashumancia y Naturaleza recibe el premio Actuaciones en Conservación de la Biodiversidad en España 2013 por sus dos décadas de trabajo en la trashumancia y la ganadería extensiva en España, que han contribuido “al mantenimiento de numerosos hábitats naturales que se degradarían o perderían sin el pastoreo”, señala el acta del jurado.
En la categoría de Conservación de la Biodiversidad en Latinoamérica el ganador ha sido el Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales, en Panamá, por sus logros para paliar la extinción de los anfibios con “un proyecto pionero de gran solvencia científica que combina la preservación en cautividad y la investigación en campo y laboratorio, cuyos resultados podrán ser aplicados en otros lugares del planeta”.
En Difusión del Conocimiento y Sensibilización en Conservación de la Biodiversidad el galardón recae en el periodista Javier Gregori, “uno de los profesionales de mayor impacto en el periodismo ambiental”, que “ha logrado combinar de manera ejemplar el rigor científico con la sensibilidad hacia los retos medioambientales”.
El jurado destaca además su papel en “un periodo en el que los espacios dedicados a la comunicación científica y ambiental en los medios generalistas se están reduciendo de manera notable”.
Los Premios Fundación BBVA a la Conservación de la Biodiversidad, creados en 2004, reconocen a instituciones que desarrollan programas de conservación medioambiental en España y en América Latina, así como a comunicadores cuyo trabajo contribuye a proteger el patrimonio natural. Cuentan con una dotación de 580.000 euros distribuidos en tres categorías.