Un nuevo estudio ha analizado más de 1.000 genomas humanos antiguos europeos para reconstruir cómo la genética puede afectar al sistema inmunitario. Los autores han descubierto que la tuberculosis ha sido un importante factor de mortalidad en los últimos 2.000 años de historia del continente.
Dos décadas después de que se secuenciara el genoma humano, Europa quiere conseguir para 2022 una gran base de datos que conecte la información genómica de más de un millón de europeos para diagnosticar y tratar patologías raras, comunes, cáncer e incluso covid. Estados Unidos se ha propuesto una meta similar.
Un artículo publicado hoy en la revista Science analiza las diferencias en las respuestas inmunitarias a la hora de enfrentarse a la covid-19 en función del sexo biológico. Este fenómeno no es exclusivo del coronavirus, pero la pandemia pone de manifiesto la necesidad de entenderlo mejor.
Ha pasado un año desde que se hicieron públicos los primeros casos de una extraña neumonía que causaba diferentes grados de gravedad. Pero solo ahora los médicos están empezando a identificar los efectos secundarios en pulmones y bienestar general en los pacientes que se recuperan. Los síntomas de fatiga y dificultad para respirar se mantienen incluso en los que sufrieron la enfermedad más leve.
Los tratamientos actuales contra la esclerosis múltiple pueden causar una supresión inmunitaria y efectos secundarios, como un mayor riesgo de infecciones. Un nuevo estudio en ratones muestra cómo una vacuna de ARN mensajero, como las que se utilizan para la covid-19, retrasó la aparición y redujo la gravedad de la enfermedad.
Un equipo liderado por la Universidad Complutense de Madrid ha identificado el mecanismo por el que el parásito Leishmania evita ser detectado: a través de la proteína SHP-1, responsable de funciones celulares básicas. Este hallazgo sitúa a dicha enzima como posible diana terapéutica para el desarrollo de vacunas contra la enfermedad.
Científicos de Suiza han utilizado organoides –órganos en miniatura cultivados en el laboratorio– para reproducir las primeras etapas del desarrollo del corazón. Este modelo pionero, publicado en Cell Stem Cell, podría usarse en el futuro para detectar los factores que intervienen en las enfermedades cardíacas congénitas.
Un enzima del virus del Zika interacciona con varias proteínas localizadas en la base del cilio primario –presente en la membrana plasmática de la mayoría de las células de mamífero–, lo que causa la generación prematura de neuronas. Según un nuevo estudio publicado en Cell Stem Cell por investigadores españoles, esto provoca la parada del crecimiento del cerebro durante el desarrollo fetal.
Aunque sean un incordio, las mucosidades son nuestro primer escudo protector frente a virus y bacterias; y la vía de transmisión de enfermedades respiratorias, como la covid-19. También pueden indicar la presencia de dolencias como la fibrosis quística o EPOC.
El gen RING1B es clave para el desarrollo del sarcoma de Ewing, un tumor óseo maligno que se forma en el hueso o en el tejido suave y que afecta principalmente a los adolescentes y adultos jóvenes. El hallazgo abre la puerta al desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas.