Solo en 2020 se detectaron en el Ártico siberiano 423 incendios, que quemaron unos tres millones de hectáreas. Esto provocó la emisión de 256 millones de toneladas de CO2, una cantidad similar a todo lo emitido en España durante un año, según un estudio liderado por investigadores españoles.
Según un nuevo informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), a medida que continúe la tendencia al calentamiento, el calor excepcional, los incendios forestales, las inundaciones devastadoras y otros efectos del cambio climático se cobrarán un precio cada vez mayor en la sociedad, las economías y los ecosistemas.
Un nuevo estudio de investigadores del Museo de Historia Natural de Londres apoya la hipótesis de que la mezcla con nuestros antepasados pudo haber sido una de las causas de la desaparición de los neandertales.
Una extensa red de vasos sanguíneos conocida como rete mirabile (red maravillosa) ayuda a proteger el cerebro de las ballenas y delfines, protagonistas de nuestro #Cienciaalobestia,, cuando nadan bajo las olas. De esta forma, se salvaguardan de los pulsos de presión sanguínea generados al sumergirse a gran profundidad.
Estos vertebrados tuvieron una explosión de diversificación en el pasado. Un estudio ha identificado los rasgos de las especies que evolucionaron más rápidamente, entre ellos: sus hábitos sociales, la dieta y la locomoción.
Un informe en The Lancet advierte de que el cambio climático está provocando graves impactos en la salud en todo el mundo. El trabajo recalca que la persistente y excesiva dependencia de combustibles fósiles está empeorando rápidamente esta crisis.
Investigadores de la Universidad de Zúrich (Suiza) y otros centros internacionales han grabado los sonidos de 53 especies de cuatro grupos o ‘clados’ de vertebrados que se consideraba que no emitían vocalizaciones: 50 tortugas, un tuátara (reptil de Nueva Zelanda), una cecilia (anfibio con aspecto de lombriz) y un pez pulmonado.
Los resultados revelan que la comunicación acústica de todos los vertebrados que respiran por la nariz pudo originarse en un ancestro común que vivió hace 407 millones de años.
La comunicación acústica de todos los vertebrados que respiran por la nariz pudo originarse en un ancestro común que vivió hace 407 millones de años. Así lo reflejan los audios grabados a especies que hasta ahora se pensaba que no podían emitir sonidos vocales, como tortugas, tuátaras, cecilias y peces pulmonados.
Este estudio, liderado por la Universidad de Oviedo, asegura que esta ‘memoria’ entre generaciones les permite recordar situaciones ambientales difíciles como las olas de calor o los periodos de sequía y responder cada vez mejor a estos fenómenos desfavorables