La victoria de Biden sobre Trump ha dado ciertas esperanzas al movimiento ecologista. El nuevo presidente tiene entre sus principales misiones la lucha contra el cambio climático en el Green New Deal. A pesar de que las expectativas son altas, su programa tiene sombras.
La covid-19 no solo ha sumido el mundo en una emergencia sanitaria, también en una crisis económica que los estados están tratando de contrarrestar. Solo una pequeña fracción de los paquetes de recuperación frente a la pandemia serviría para cubrir la inversión anual en energías verdes y afrontar la otra gran crisis que amenaza el planeta, la climática, según un nuevo estudio.
Investigadores españoles han desarrollado en el MIT un sistema para producir electrodos de baterías de vanadio, usadas en almacenamiento de energías renovables, a partir de la quitina, un polisacárido que se encuentra en el exoesqueleto de crustáceos e insectos. La ventaja de este componente es que, además de carbono, contiene nitrógeno, que se incorpora a la estructura del electrodo durante el proceso de transformación y mejora su rendimiento.
Investigadores de las universidades Carlos III de Madrid y de Jaén han presentado un sistema de predicción de la radiación solar en la península ibérica que reduce hasta en un 30 % el error en los pronósticos. Los resultados pueden ayudar a un mejor aprovechamiento de la energía solar en este territorio.
Los efectos de la desescalada y el consiguiente incremento de la actividad económica ya se reflejan en un aumento del consumo eléctrico nacional. La demanda ha crecido de los 17.003 gigavatios hora del pasado mes de abril, que supusieron una caída histórica, a los 18.366 GWh de mayo, según los datos de Red Eléctrica de España.
Los eventos climáticos extremos son cada vez más frecuentes y afectarán a los sistemas de suministros de energía provocando apagones, según un nuevo método que ha medido por primera vez el impacto de la crisis climática en el potencial y la demanda de energía verde. El cambio climático podría retrasar la transición hacia estas energías.
La aleatoriedad del viento plantea serios problemas a los sistemas eléctricos, que necesitan calcular la generación con un día de antelación. Ahora investigadores de Italia y España han desarrollado un método basado en redes neuronales de tercera generación para predecir la cantidad de energía que generarán las turbinas de un parque eólico según el comportamiento previo del viento.
Investigadores de las universidades Politécnica de Valencia y Jaume I de Castellón han desarrollado un sistema para, mediante energías renovables, recuperar el suministro eléctrico tras un apagón, como el que ocurrió en septiembre en Tenerife. El secreto está en aprovechar todo el potencial de los parques eólicos, evitando recurrir a las plantas térmicas como hasta ahora.
Investigadores de KU Leuven en Bélgica y otros centros internacionales han descubierto una técnica para desarrollar placas solares con un prometedor supermaterial, la perovskita, de forma más eficiente y estable que hasta ahora. Para el estudio se ha utilizado la luz del sincrotrón ALBA.
Un total de 42 proyectos científicos serán financiados por la Fundación Ramón Areces con 5,2 millones de euros destinados al desarrollo científico, con especial atención a la investigación en enfermedades raras y tratamiento del cáncer. La institución también ha destacado su interés por los trabajos relacionados con las energías renovables y los nuevos materiales.