Un reciente estudio publicado en el Journal of Human Evolution por un equipo científico español ha demostrado que la morfología de las falanges, y por tanto de la mano, ha permanecido estable desde hace 1,3 millones de años.
Dibujos y fotografías de los cuatro alisadores descubiertos al suroeste de Francia. / Imagen cortesía del Proyecto Abri Peyrony e-l'Azé Pech-de.
Punta de flechas en Kathu Pan 1 (Sudáfrica). Imagen: Jayne Wilkins.
Una investigación de la Universitat Rovira i Virgili y el Instituto Catalán de Paleoecologia Humana y Evolución Social (IPHES) revela que los humanos del Paleolítico Superior reciclaban sus artefactos de piedra para nuevos usos. El estudio se basa en artefactos quemados hallados en el yacimiento de Molí del Salt en Tarragona.
Hace 350.000 años, algún grupo de homínidos que pasó por Gran Dolina, en el yacimiento burgalés de Atapuerca, debió pensar que, para el tiempo que iban a pasar en la cueva, era mejor utilizar como herramientas los huesos de los bóvidos que acababan de cazar que salir al exterior en busca de piedras para ese propósito.
Nuevas investigaciones avalan la complejidad de las sociedades prehistóricas. Un estudio de herramientas de hueso llevado a cabo por el Instituto Catalán de Paleoecologia Humana y Evolución Social (IPHES) evidencia que, además de acoger grandes campamentos, el nivel 10 de Gran Dolina (Atapuerca), con una antigüedad de unos 350.000 años, servía de refugio para los homínidos de manera ocasional.
Un equipo internacional de investigadores demuestra hoy en Science que el ser humano podría haber llegado a Arabia directamente desde África hace unos 125.000 años. Hasta ahora se creía que el éxodo humano se produjo hace unos 60.000 años a través del Valle del Nilo o Medio Oriente.
Un equipo internacional dirigido por el Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) de la Universidad Rovira i Virgili ha descubierto 1.168 nuevos fósiles de fauna e industria lítica de hace unos 1,3 millones de años en los yacimientos de Orce en Granada. Las herramientas halladas en la campaña realizada desde el 30 de agosto hasta ayer son las más primitivas de Europa y los científicos las relacionan con los conjuntos africanos.
Zeresenay Alemseged, líder del proyecto, excavando un fósil de 3,4 millones de años.
Un grupo internacional de científicos ha descubierto en Etiopía las pruebas más antiguas de que los antepasados del hombre ya usaban herramientas de piedra para descuartizar y cortar la carne. El estudio, que se publica ahora en Nature, demuestra que la especie de Lucy (Australopithecus afarensis) usaba estos útiles a modo de cuchillo un millón de años antes de lo que se pensaba.