Estudiar el papel de los productos de origen marino en los ecosistemas de la Antártida y valorar cuál es su potencial farmacológico son los objetivos principales de la nueva campaña científica Actiquim-II, que dará comienzo en diciembre.
No hace falta un laboratorio para dar una completa clase de Química. Las decenas de personas asistentes al acto inaugural del curso académico de la UNED en la Facultad de Humanidades (Madrid) escucharon este martes con sumo interés los entresijos de un tipo peculiar de molécula, las gigantes, comentadas con detalle por el catedrático de Química Física Arturo Horta.
Cuando los telescopios observan el universo no solo detectan estrellas, planetas y galaxias, también moléculas como el agua, el metanol o el benceno. La astroquímica está experimentando una verdadera revolución gracias a los datos que aportan los nuevos instrumentos, como el Herschel, y sus últimos avances se han presentado este año en España. El objetivo es conocer cómo se forma la materia en las grandes nubes moleculares del universo.
Gracias a un nuevo sistema se pueden controlar en tiempo real los niveles de mercurio, un metal muy tóxico, en el agua. El trabajo, que mejora la salud y el medioambiente, es obra del Grupo de Excelencia de Química de Heterociclos de la Universidad de Murcia, en colaboración con un grupo del Instituto de Ciencia de los Materiales de Barcelona del CSIC y la Universidad de Regensburg (Alemania).
Investigadores del grupo Física de Líquidos Complejos de la Universidad de Huelva han diseñado fórmulas matemáticas para conocer- mediante técnicas de simulación molecular- la tensión superficial de fluidos como el agua o hidrocarburos. Este algoritmo tendrá aplicaciones directas para la industria y la biología. Así, será útil para explicar procesos biológicos como la fagocitosis (proceso mediante el cual una célula especializada, macrófago, se une a un microorganismo) o el intercambio de proteínas a partir de la membrana celular.
Un grupo de científicos europeos en el que participan investigadores de la UAM consigue por primera vez utilizar pulsos láser con una duración de atosegundos para observar el movimiento de los electrones en las moléculas. El trabajo —recién publicado en Nature— requirió la realización de complejos cálculos teóricos en los ordenadores más avanzados que existen actualmente.
Avances en la observación de moléculas individuales permiten vislumbrar los factores que determinan su ordenación sobre superficies, lo que puede dar lugar a nuevas aplicaciones nanotecnológicas. Investigadores del Departamento de Química Inorgánica de la Universidad Autónoma de Madrid han estudiado las condiciones que se requieren para organizar, en forma de hilos, moléculas discretas que contienen dos átomos de platino.
La comunidad científica considera la explosión cambriana uno de los episodios más relevantes de la historia de la vida sobre la Tierra, con la aparición por primera vez en el registro fósil de la mayor parte de las divisiones de los animales. Pero las causas han sido objeto de debate durante décadas.Ahora una nueva teoría formula que el contenido oceánico de calcio, generado por la actividad volcánica, podría ser clave para entender la explosión de la vida en el Cámbrico.
Un astrofísico español y otro francés han identificado una banda en el rango del infrarrojo que sirve para rastrear la presencia de materia orgánica rica en oxígeno y nitrógeno en los granos de polvo interestelares. Si algún telescopio detecta esa banda se podría confirmar la presencia en el espacio de aminoácidos y otras sustancias precursoras de la vida.