Un estudio demuestra que estos felinos responden de manera diferente al olor de su dueño que al de una persona que acaban de conocer. De hecho, emplean más tiempo en olfatear a los desconocidos y prefieren hacerlo con la fosa nasal derecha. Esto señala que emplean los hemisferios cerebrales para distintas tareas.
Los nuevos avances biomoleculares permiten analizar los aromas que se conservan en artefactos y elementos arqueológicos de épocas pasadas. Un equipo de científicos alemanes quiere utilizar esta nueva información para descubrir nuevos aspectos del mundo antiguo, de nuestras sociedades y de la evolución como especie.
Investigadores de la Universidad de Rockefeller (EE UU) han descrito el complejo mecanismo que utilizan los receptores olfatorios para detectar las moléculas odoríferas, y por primera vez ofrecen imágenes, obtenidas con microscopía crioelectrónica, de su estructura funcionando. Estos receptores son ‘promiscuos’, se pueden unir a un gran número de moléculas diferentes.
“Cada persona tiene un olor único que se desprende de su piel, sobre el que no actúa ni la limpieza ni el perfume y que media en su vínculo con los demás. El olor corporal (...) nos individualiza como las huellas digitales”. Publicamos un extracto del libro Odorama: Historia Cultural del Olor (Taurus), escrito por el periodista de ciencia Federico Kukso.
Lejos de ser un capricho, la preferencia o aversión a ciertos aromas está codificada en el material genético. Un equipo de científicos islandeses descubrió que las personas con una variante en un gen encuentran el olor a pescado putrefacto menos desagradable e intenso que otras.
La repentina merma del olfato y el gusto podría ser uno de los síntomas de COVID-19. No se trataría de la primera infección que produce alteraciones de las percepciones nasales, también causadas por traumatismos, tumores, abuso de drogas y exposición a toxinas.
Un estudio realizado por neurocientíficos de la Universidad de Cambridge y del Instituto de Ciencias Weizmann de Israel muestra que testear la respuesta a olores en personas con trastornos de la conciencia podría ayudar a diagnosticar y determinar con precisión los planes de tratamiento.
Investigadores de las universidades de Cádiz y Autónoma de San Luis Potosí (México) han desarrollado un método que clasifica de manera más rápida y precisa los compuestos químicos que otorgan su olor a la cerveza. De esta forma se puede mejorar su calidad y el proceso de producción.
¿Qué es lo que hace que el icónico perfume Chanel nº 5 siga teniendo éxito casi un siglo después de su creación? ¿Es su combinación de ingredientes? ¿Están presentes estos ingredientes en perfumes posteriores? A estas preguntas han querido responder dos investigadores del Imperial College de Londres, que han analizado más de 10.000 fragancias.