Frenar el crecimiento del glioblastoma en modelos de ratón bloqueando a la proteína TRF1, componente esencial de la estructura que protege a los telómeros. Eso es lo que han conseguido investigadores del CNIO, que han descrito una nueva y prometedora forma de combatir este tumor cerebral, uno de los más letales y difíciles de tratar. Los resultados se publican en Cancer Cell.
Un estudio internacional, en el que ha colaborado el Instituto de Investigación del Hospital del Mar, describe exhaustivamente el genoma del cáncer de vejiga. Los investigadores han descrito cinco nuevos subtipos, lo que abre la puerta a explorar nuevas opciones de tratamiento personalizado.Este tipo de cáncer es una de las principales causas de mortalidad en el mundo, el cuarto tipo de tumor más común en hombres.
Carlos Ortiz de Solórzano, investigador del Centro de Investigación Médica Aplicada, coordina una competición internacional que analiza 52 vídeos de microscopía. Estudiar cómo se mueven las células ayuda a conocer los procesos normales y patológicos. El seguimiento o tracking celular es una herramienta muy útil también para conocer de dónde proceden las células de un órgano y conocer así los procesos iniciales de una enfermedad.
Neurocientíficos de la Universidad Autónoma de Madrid han conseguido medir por primera vez la estructura tridimensional de los contactos intercelulares que permiten que la información de los sentidos ‘entre’ a la corteza cerebral. El estudio se publica en la revista Cerebral Cortex y está adscrito al proyecto europeo The Human Brain Project.
La condición física de los niños influye en la estructura cerebral, lo que a su vez puede determinar su rendimiento académico, según una investigación liderada por la Universidad de Granada. En el estudio clínico han participado más de 100 niños con sobrepeso y obesidad.
Científicos de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado un biosensor óptico con un método de lectura sencillo, rápido y económico que permite la detección in vitro de material biológico. Gracias a su utilización, los investigadores han conseguido resultados muy prometedores para el diagnóstico de la enfermedad de ojo seco.
La ‘tijera molecular’ que promete corregir enfermedades, CRISPR-Cas9, no es única: existen otras versiones menos conocidas de esta herramienta. “Quizá alguna sea más eficiente para editar genéticamente las células humanas”, explica a Sinc el argentino Luciano Marraffini. Él fue quien descubrió cómo las bacterias utilizan CRISPR en defensa propia, cortando el ADN de sus invasores. Ahora, sigue ‘jugando’ con bacterias para entender esos otros sistemas alternativos.
En enfermedades como el cáncer o la fibrosis hepática y pulmonar, el tejido se vuelve más rígido y las fuerzas mecánicas activadas por las células aumentan, promoviendo la progresión de la enfermedad. Un equipo del Instituto de Bioingeniería de Cataluña ha descubierto la manera en la que estas fuerzas desencadenan la expresión de genes promotores del cáncer.
Un estudio confirma que la esclerosis múltiple es una enfermedad única, aunque todos los síntomas y cursos de la enfermedad observados en los pacientes son producidos por los mismos mecanismos subyacentes que dañan las células nerviosas con el tiempo. Gracias a un modelo matemático, los expertos apuntan que, aunque puede seguir diferentes patrones, la patología empeorará para todos los afectados.
Cuando las bacterias entran en nuestro cuerpo, activan una respuesta inmunitaria muy potente. Pero la reacción en cascada que se produce no explica la respuesta más inmediata. Investigadores de la Universidad de Lovaina y de la Universidad Pompeu Fabra muestran por primera vez que los canales iónicos de la membrana celular desempeñan un papel clave en el proceso, siendo los primeros que responden ante una infección.