Según una investigación presentada en el Congreso Europeo sobre Obesidad, la exposición en el útero o durante la infancia a las sustancias químicas conocidas como disruptores endocrinos, utilizadas para fabricar productos como biberones, revestimientos de las latas de alimentos y algunos envoltorios y envases de plástico para alimentos, podría contribuir al desarrollo de obesidad. Estos disruptores mimetizan o alteran los efectos de las hormonas en el organismo.
A partir de la octava semana de gestación y a través de un sencillo análisis de sangre que recoge ADN, una nueva prueba permite conocer con gran fiabilidad el sexo del feto. Además, podrán ser diagnosticadas enfermedades monogénicas ligadas al cromosoma X, como la hemofilia o la distrofia muscular. La investigación se ha desarrollado en el Hospital Virgen de las Nieves de Granada.
Un trabajo internacional realizado por el Centro de Investigación en Epidemiología Ambiental (CREAL) y por el Instituto Municipal de Investigación Médica (IMIM-Hospital del Mar), con la colaboración de la University of Aarhus de Dinamarca, pone de manifiesto la relación existente entre la utilización de paracetamol durante el embarazo, especialmente en el primer trimestre de gestación y, el riesgo de que los niños sufran problemas respiratorios o desarrollen asma a lo largo de los primeros siete años de vida.
Tomar demasiada cafeína durante el embarazo aumenta el riesgo de aborto