Un estudio en el que ha participado el Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha propuesto una nueva aproximación para explicar el origen de la vida en la Tierra basada en la química de sistemas. Según este planteamiento, los primeros seres vivos, que aparecieron hace más de 3.500 millones de años, surgieron en medios heterogéneos, que posibilitaron una química suficientemente compleja.
Las empresas farmacéuticas europeas restringen la exportación de medicamentos que pueden utilizarse para aplicar la pena de muerte. Varios estados estadounidenses, incapaces de encontrar equivalentes farmacológicos, ya han aplazado condenas por esta razón; otros han encargado compuestos sustitutivos a farmacias locales no reguladas.
Investigadores del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (ICMA) y el Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea (ISQCH) han confirmado de forma experimental un mecanismo que explica la alta movilidad del ión hidrógeno en el agua, planteado por el químico Grotthuss hace más de 200 años. La revista Angewandte Chemie destaca en su portada este avance, que abre nuevos campos de aplicación a los materiales moleculares no porosos.
Científicos del Instituto de Síntesis Química y Catálisis Homogénea (ISQCH) han detectado una nueva forma para el desarrollo de tipos novedosos de polímeros degradables, llamados poli(sililéteres), con posibles aplicaciones industriales. Los detalles se publican en la revista Catalysis Science and Technology.
Investigadores de la Universidad Jaume I de Castellón han desarrollado un novedoso catalizador para la activación de enlaces carbono-flúor, un proceso con multitud de aplicaciones industriales. Entre ellas se encuentra la posibilidad de reducir las existencias de CFC, un conocido gas de efecto invernadero.
Investigadores de la Universidad de Burgos han desarrollado un material inteligente que cambia de color según el hierro que lleve un fluido, sea agua, vino o suero sanguíneo. Después, si se fotografía el resultado con una cámara digital, como la de los móviles, se puede cuantificar la concentración de este metal sin necesidad de análisis químicos.
Una gota de fluido sobre el material inteligente informa del hierro en sangre, agua o vino con la ayuda del móvil. / UBU
Investigadores de la Universidad de Barcelona han encontrado un procedimiento que facilita el diseño de nuevas sondas fluorescentes, de uso común en el marcaje de moléculas de interés biológico. El estudio, que publica el Journal of the American Chemical Society, utiliza las denominadas reacciones multicomponente para generar diversidad estructural en los marcadores.