Un estudio de la Universidad de Ginebra (Suiza) asegura que gestionar mejor las emociones podría prevenir el envejecimiento patológico. Para llegar a esta conclusión realzaron un experimento que consistió en enseñar a un grupo de los voluntarios breves clips de televisión que mostraban a personas en un estado de sufrimiento emocional.
Cualquier enfrentamiento bélico tiene unas consecuencias terribles para la salud de la población y dura generaciones. Al número de muertes, heridas graves y problemas psicológicos, hay que sumarle la pérdida de recursos sanitarios que origina. Esto afectará durante años al bienestar y progreso de la sociedad.
Un nuevo estudio ha analizado durante 16 meses la prevalencia de los síntomas de depresión, ansiedad, angustia relacionada con el SARS-CoV-2 y mala calidad del sueño entre las personas con y sin diagnóstico de la infección. Los resultados indican que las personas que permanecieron en cama durante siete días o más tienen un mayor riesgo de experimentar trastornos de salud mental.
Una investigación realizada en más de 150.000 veteranos de EE UU que pasaron el coronavirus muestra una probabilidad 60 % mayor de tener cualquier diagnóstico de salud mental al cabo de un año. Los expertos insisten en que debería ser prioritario abordar estas dolencias entre los supervivientes de la infección.
Nuestra salud mental se resiente desde hace años. La depresión es una de las principales patologías, que hoy sigue siendo poco reconocida y comprendida. Una comisión de especialistas hace un llamamiento para mejorar la atención y prevención de una de las principales causas de sufrimiento y muerte prematura en el mundo.
Los estudios en personas con este grave problema de salud pública muestran que las limitaciones para controlar la infección por coronavirus han mermado su estado de salud. Los expertos afirman que para mejorar su calidad de vida es necesario un abordaje integral, con ejercicio físico y terapia psicológica, no solo fármacos.
Un estudio publicado en la revista The Lancet confirma el fuerte impacto de la covid-19 en la salud mental, con 53 millones de casos adicionales de depresión severa y 76 millones más de episodios de ansiedad en 2020. Aunque se trata de un problema global, la población más afectada son las mujeres y los más jóvenes.
La investigadora del Instituto de Neurociencias de Alicante ha sido premiada por sus descubrimientos fundamentales sobre cómo las células cambian de identidad durante el desarrollo embrionario para diseminarse y formar diferentes tejidos. Según el jurado, su trabajo ha contribuido a facilitar la comprensión de cómo el cáncer se extiende a otros órganos y forma metástasis. Estos galardones se reparten entre cinco científicas de cinco continentes.
Las muertes por conductas suicidas han aumentado en 20.000 en los últimos 30 años en todo el mundo y la pandemia no ha mejorado la situación. Expertos de distintas disciplinas coinciden en que es necesario tratar el tema para hacerle frente, sin sensacionalismos y con fuentes fiables.
Investigadores españoles han analizado cómo aquellas personas que realizaron más actividad física y de mayor intensidad afrontaron mejor el encierro domiciliario y experimentaron menos síntomas depresivos y mayor bienestar emocional.