La pandemia ha allanado el camino a la consolidación de los estudios de salud descentralizados que permiten a las personas participar desde casa y a los investigadores utilizar la tecnología para comunicarse con los voluntarios.
Investigadores del CNIO han tratado ratones obesos con digoxina, un fármaco indicado contra varias enfermedades cardiacas, y han observado cómo los animales perdían hasta un 40 % de peso incluso al tomar una dieta rica en grasa. Además, los roedores se curaron de trastornos metabólicos asociados a la obesidad.
Juan Carlos Izpisúa ha vuelto a hacerlo. Como ya avanzó en 2019, su equipo ha inyectado células madre de personas en embriones de primates para desarrollar nuevos modelos de enfermedades humanas y generar órganos trasplantables. Este ambicioso experimento no solo plantea problemas biológicos, sino también éticos.
Un nuevo estudio observacional de investigadores estadounidenses indica que las personas que no realizan nada de ejercicio físico y se infectan por covid-19 tienen más del doble de probabilidades de ser ingresados en el hospital, en comparación con aquellos que se ejercitan durante más de dos horas a la semana. Este factor sería incluso más perjudicial que el tabaquismo, la obesidad, la hipertensión o la pobreza.
Investigadores del CNIO han estudiado la resistencia a la temozolomida, tratamiento de primera línea del glioblastoma, y al que muchos de los pacientes dejan de responder con el paso del tiempo. La combinación de este fármaco y el dianhidrogalactitol actúa de forma sinérgica, elude estas resistencias, y aumenta la supervivencia en ratones con tumores cerebrales.
Un gen maestro, denominado Neurogenina2, es capaz de reprogramar los astrocitos y convertirlos en neuronas. El descubrimiento abre la puerta a recuperar los circuitos sensoriales de la vista o el oído dañados en etapas tempranas de la vida.
Un estudio internacional ha utilizado criomicroscopía electrónica para explicar cómo la proteína MutS, considerada la ‘guardiana’ del genoma, consigue reparar los errores que pueden producirse en el ADN durante la división celular.
Investigadores españoles han observado en modelos animales cómo la suplementación de la dieta materna con betaína –presente en cereales integrales, espinacas, remolacha o quinoa– durante la lactancia induce cambios transitorios en la microbiota intestinal de las crías y mejora su salud metabólica a largo plazo.
En 2001 se publicaron dos artículos, en Science y en Nature, que marcaron un hito en la historia de la humanidad. En ellos se presentaba el primer borrador del código en el que están escritas las instrucciones de la vida. Su consecución revolucionó nuestra comprensión de la biología y ha permitido avances importantes en ámbitos de la medicina como el cáncer. El bioinformático Roderic Guigó y su entonces estudiante de doctorado Josep Abril fueron los únicos españoles que participaron en el proyecto.
Un estudio en ratones confirma que las hormonas del estrés suprimen el crecimiento del cabello a través de la regulación de las células madre del folículo piloso. Los resultados apuntan cómo se podría revertir este mecanismo.