Para quienes no disfrutan las largas horas de cola frente a la torre Eiffel o el London Eye, existe otra manera de visitar ciudades: a través de los hitos de la historia de la ciencia. Proponemos un recorrido por los tesoros científicos de Europa, alejado de los circuitos de masas.
El mejor plan estival para algunos es excavar en busca de pistas sobre el origen del compartamiento humano. Al menos, para los investigadores del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, que participan un año más en un proyecto español en los yacimientos tanzanos de la Garganta de Olduvai
La oligarquía ibérica hacía uso de imágenes pintadas en cerámica para autoafirmar su categoría aristocrática y como forma de integración en el nuevo orden romano o auto romanización que empezaba a imperar en España.
Un equipo del CENIEH están realizando trabajos de excavación arqueológica en este yacimiento, al norte de Argelia, donde también ha encontrado fósiles de mamíferos grandes
En julio de 1799 se descubre de forma casual la Piedra Rosetta.
El egiptólogo José Manuel Galán ha presentado esta mañana los hallazgos de la décima campaña arqueológica que emprendió a principios de año en Luxor (Egipto). Galán ha explicado a SINC qué nuevos tesoros oculta la cámara sepulcral de Djehuty, antiguo escriba real que da nombre al proyecto, y la tumba de Hery, personaje de la corte real que vivió 50 años antes que el copista.
Los trabajos de excavación que desde el mes de mayo realiza el Centro Andaluz de Arqueología Ibérica (CAAI) de la Universidad de Jaén en el yacimiento arqueológico de Puente Tablas (Jaén) han sacado a la luz un palacio ibero, convirtiéndose en el primer edificio aristocrático de estas características que se ha excavado en Andalucía.
En el yacimiento de Poças de São Bento (Alcácer do Sal, Portugal), un equipo de las universidades de Cantabria y Lisboa ha encontrado una sepultura de perro que ha resultado ser la más antigua que se conoce al sur del continente. El enterramiento apareció en un asentamiento que a la vez era cementerio de unos 8.000 años de antigüedad, junto al antiguo estuario del río Sado. El hallazgo corrobora que en el Mesolítico este animal se integró en prácticas rituales.