Investigadores del Instituto IMDEA Nanociencia están desarrollando un sensor para identificar la presencia del coronavirus SARS-CoV-2 mediante diminutas partículas de oro con ADN. Estas tiñen de rojo una disolución, pero el color desaparece con la presencia del ARN viral.
Los virus y bacterias se suelen detectar mediante test basados en sus datos genéticos, pero en el futuro se podrían identificar de otra manera: por sus vibraciones. Usando sensores optomecánicos, investigadores del CSIC han logrado medir la frecuencia de resonancia de una sola bacteria, una información muy valiosa para conocer sus características y el tipo al que pertenece.
Investigadores del Instituto Catalán de Nanociencia y Nanotecnología y otros centros europeos fabricarán un dispositivo biosensor para analizar en menos de 30 minutos la presencia del nuevo coronavirus en muestras de pacientes. El proyecto, denominado CoNVat, toma lo mejor de los sistemas de diagnóstico actuales, como las pruebas PCR y los test rápidos.
El sincrotrón ALBA, localizado cerca de Barcelona, ha abierto una convocatoria de proyectos prioritaria para investigar la estructura del nuevo coronavirus y sus mecanismos de infección. Las ocho líneas de luz con las que cuenta este centro, inaugurado justo hace ahora 10 años, permiten analizar la materia a escala atómica y molecular.
Inspirándose en los conceptos de calidad del hábitat natural y corredor ecológico, investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado una metodología para estudiar y mejorar la movilidad peatonal en las zonas urbanas. Con esta técnica se ha propuesto una red optimizada de corredores peatonales en Vitoria (País Vasco), pero se podría aplicar también en otras ciudades.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han desarrollado interfaces de realidad virtual para que las personas invidentes puedan familiarizarse con un lugar desconocido antes de visitarlo. El avance se ha implementado en smartphones como si fuera un videojuego y ya lo han probado con éxito algunos voluntarios de la ONCE.
Una nueva red social, llamada PESEDIA, utiliza inteligencia artificial (IA) y juegos educativos para advertir a los adolescentes del alcance y los riesgos de la información que van a publicar en internet. Ha sido desarrollada por investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia.
Este año el Mobile World Congress contará con el pabellón Deep Tech EU donde se exhibirán las cuatro iniciativas de investigación e innovación más ambiciosas de la Comisión Europea: el Graphene Flagship, el Human Brain Project, el Quantum Flagship y la nueva Battery 2030+. La cita es en Barcelona entre el 24 y 27 de febrero.
Una red neuronal artificial ha identificado una estructura cuadrada dentro de otra triangular en un cráter del planeta enano Ceres, una apreciación en la que han coincidido varias personas. El resultado de este curioso experimento visual, realizado por un neuropsicólogo de la Universidad de Cádiz, pone en entredicho la aplicación de la inteligencia artificial en la búsqueda de vida extraterrestre (SETI).
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han diseñado una herramienta que permite evaluar la calidad ambiental y funcional de las unidades de un hospital. De esta forma se puede estudiar el potencial que ofrece su diseño arquitectónico en la recuperación de pacientes, además de la repercusión económica que supone para los centros sanitarios.