Ocho meses después del pico de muertes en marzo y abril, ¿ha mejorado el pronóstico de los pacientes que ingresan en el hospital? La covid-19 sigue siendo una enfermedad potencialmente muy grave, pero varios estudios apuntan a una mejora en las terapias y la atención sanitaria. Recogemos aquí las novedades y los caminos tortuosos que han llevado hasta ellas.
Los anuncios de Moderna y Pfizer parecen confirmar que sí es posible inmunizar contra el SARS-CoV-2, pero quedan cuestiones cruciales. ¿Reducirán solo los síntomas o evitarán la infección? ¿Protegerán a personas de riesgo? ¿Durante cuánto tiempo? Hablamos con siete personas expertas, dos hombres y cinco mujeres, para comprender el alcance de estas noticias. Un adelanto: todas mantienen un “optimismo prudente”.
Ninguna de las grandes compañías que están desarrollando vacunas para la covid-19 se ha sumado a las iniciativas mundiales para compartir la propiedad intelectual. Las patentes y las exclusividades no permitirían a otras empresas fabricarlas y hacer frente a uno de los mayores retos: tener la capacidad de producir y distribuir todas las dosis necesarias en todos los países lo antes posible.
Investigadores españoles han simulado, aplicando un modelo computacional, cuál sería el impacto en la pandemia del uso temprano de antivirales, una vez se disponga de ellos en las farmacias. Ahora, sin estos medicamentos, el sistema arroja un máximo de contagios en el país a finales de noviembre y de hospitalizaciones a principios de diciembre.
Investigadores españoles han participado en la creación de una nueva herramienta biológica que permite generar variantes genéticas del coronavirus para estudiarlo, analizar fármacos antivirales y poder desarrollar candidatos vacunales.
El estudio Solidarity, coordinado por la Organización Mundial de la Salud en más de 30 países, indica que las terapias con remdesivir, hidroxicloroquina, lopinavir/ritonavir e interferón no han tenido efecto en la mortalidad a los 28 días ni en la evolución de los enfermos ingresados con infección por SARS-CoV-2.
Las corporaciones farmacéuticas no están obligadas a revelar sus costes de I+D, cuánto dinero público reciben para el desarrollo de un medicamento o qué precios cobran en diferentes países. Silvia Mancini, experta en Salud Pública y responsable de Asuntos Humanitarios de Médicos Sin Fronteras en Roma, es testigo del paso pionero que acaba de dar Italia al exigir una mayor claridad a la industria.
Un equipo del Centro Nacional de Biotecnología del CSIC ha demostrado que la alternancia y combinación de ciertos antibióticos es efectiva frente a infecciones por Pseudomonas aeruginosa, una bacteria que ataca a las vías respiratorias, las urinarias y otros tejidos.
En la carrera por la inmunización frente al nuevo coronavirus, encabezada por la Universidad de Oxford y la firma estadounidense Moderna, también participan grupos españoles. Varios de ellos podrían empezar a probar sus candidatos en humanos antes de que acabe el año. Hemos hablado con sus líderes.