En los años 60, si a un niño no le regalaban el Cheminova por Navidad, podía dejarse la paga en la droguería y montar uno casero. Nunca sería tan completo como aquella caja del Quimicefa, rebosante de materiales de colores, que disfrutaron los niños de los 80 hasta que fue retirado del mercado por peligroso. Después las videoconsolas desplazaron a los juguetes científicos, pero ahora algunos tratan de recuperar la fórmula de aquellos juegos que excitaban la creatividad y la curiosidad; esas cualidades que comparten la infancia y la ciencia.
Las tecnologías inalámbricas han llegado a dispositivos que hasta hace poco estaban aislados dentro del cuerpo de los pacientes. Marcapasos, desfibriladores y bombas de insulina mandan ahora información en tiempo real al médico, pero este gran avance terapéutico también conlleva peligros latentes: ataques informáticos, virus o errores de programación. Aunque son muy inusuales, algunos han producido muertes.
Reconózcalo: los acepta, pero usted no ha leído los ‘Términos y Condiciones de Uso’. Hacerlos asequibles para el usuario nunca ha estado entre las prioridades de la industria del software. Ahora, un grupo de hackers trata de darle la vuelta a estos requisitos legales, haciéndolos comprensibles y exponiendo cláusulas abusivas en conocidos programas.
Los seres humanos escuchamos las primeras palabras aún dentro del útero materno, arrancamos a hablar transcurrido más de un año y después, nuestro cerebro pasa toda la vida jugando con mensajes. En ese proceso, él mismo se transforma. En San Sebastián, los psicolingüistas del Basque Center on Cognition, Brain and Language estudian cómo se procesan la sintaxis, los acentos, las metáforas y las matemáticas en individuos bilingües, monolingües, analfabetos y sordos. Todo para explorar las raíces neuronales de la comunicación.
Cuando usted llama por teléfono y le responde una máquina, es probable que eche de menos un poco de empatía. Ingenieros y psicolingüistas intentan lograr que los sistemas de reconocimiento de voz se enteren de lo que pedimos, nos respondan como lo haría una persona e incluso perciban los acentos. No desespere: están trabajando en ello.
Antes de que Richard Owen pronunciara por primera vez la palabra ‘dinosaurio’ en 1841, muchos naturalistas ya habían comenzado a extraer del suelo grandes restos fósiles sin saber exactamente a qué pertenecían. Incluso llegaron a ver los testículos de un superhombre en el fémur del primer terópodo descubierto. Lo llamaron 'Scrotum humanum'.
Más de cuatro décadas después de su inauguración, y en pleno debate sobre la continuidad de Santa María de Garoña, la primera central nuclear construida en España comienza la fase final de un proceso de desaparición comenzado en 2010. En 2016 la central José Cabrera, más conocida como Zorita, será historia.
El International Journal of Humor Research es, pese a las apariencias de frivolidad, una revista muy seria. Como cualquier publicación científica que se precie, sus artículos pasan el proceso de revisión por expertos y cuentan incluso con un factor de impacto. El lingüista italiano Salvatore Attardo dirige desde Texas esta revista, cuya misión última es tratar de descubrir el mayor misterio de cuantos rodean a la ciencia del humor: ¿qué nos hace gracia?
El hayedo no tiene el estatus positivo de otros bosques como los de robles o castaños. Los expertos aún no son capaces de decir a ciencia cierta si estos bosques se están reduciendo o, por el contrario, avanzan sigilosamente a la sombra de otras especies. Pese a su fama, estos bosques crean una atmósfera neblinosa que sirve de hogar a muchas especies de animales, algunas tan amenazadas como el visón europeo, y los tonos rojos y anaranjados que su hoja adopta en otoño son inconfundibles y sin apenas parangón en la flora ibérica.
Tras siglos de supervivencia, el castaño se enfrenta ahora a dos terribles amenazas: las plagas y el abandono por parte del ser humano, el mismo que hace siglos los trajo a la Península Ibérica y los utilizó para alimentarse de su fruto y utilizar su madera.