Los recursos genómicos ayudan a identificar factores genéticos involucrados en la respuesta de las especies al aumento de la temperatura del agua. Además, permiten diseñar acciones eficaces para su conservación.
El crecimiento de la población en todo el mundo y el aumento del consumo energético han despertado el interés hacia nuevos materiales alternativos de almacenamiento de energía. La Universidad de Córdoba, con otros centros internacionales, han diseñado por primera vez una batería más sostenible a partir de residuos de pescado.
Las enfermedades que transmiten los mosquitos causan más de 700.000 muertes de seres humanos al año. Identificar qué sustancias químicas están implicadas en que el olor corporal de las aves los atraiga puede resultar útil en investigaciones para el control de estos insectos.
Dicen que las nuevas generaciones siempre mejoran a sus antecesores. Al menos esto es lo que ocurre con diferentes especies de Pterophyllum scalare –más conocido como pez escalar o ángel–, protagonistas de nuestro #Cienciaalobestia, que producen crías híbridas aún más coloridas que sus progenitores.
Estos dinosaurios presentaban un cuerno facial, visión binocular y aperturas nasales tras la eclosión del huevo. Estos rasgos se transformaban con el paso a la edad adulta, según una investigación publicada en la revista Current Biology.
Un equipo científico ha estudiado la variación en la coloración amarilla del iris del mochuelo europeo (Athene noctua) y el autillo europeo (Otus scops). Este rasgo se relaciona con la edad y la calidad de los individuos en ambas especies.
Estos fósiles de dinosaurios terópodos fueron encontrados en los afloramientos del Grupo Enciso de Igea, con una datación de entre 129 y 110 millones de años.
Paleontólogos de Perú y Argentina hallaron por primera vez en la Amazonía peruana los restos de un perezoso gigante con 46 marcas del ataque del depredador terrestre más grande después de la extinción de los dinosaurios, el Purussaurus, un enorme caimán, tan largo como un autobús, que intriga a los científicos.
Estos pequeños crustáceos, parecidos a langostas, tienen caparazones diminutos y pueden encontrarse en casi todos los océanos. Su estudio ayuda a comprender cómo se produce la diversificación de especies marinas.
El cefalópodo Metasepia pfefferi, protagonista de #Cienciaalobestia, se encuentra entre los más famosos y fotografiados del mundo por su color cambiante. Pero lo que no saben sus legiones de fans es que, en realidad, pasa la mayor parte del tiempo camuflada.