Las últimas excavaciones en la Cova de les Llenes en Lérida –que finalizan mañana– han permitido demostrar las visitas continuadas que realizaron diferentes grupos neandertales para cazar animales que vivían en los alrededores de la cueva, como ovejas salvajes y corzos. Pero la cavidad era una madriguera de carnívoros de los que destaca el oso de las cavernas que la utilizaba para hibernar.
Coral blanqueado en el fondo del oceáno. / Wikipedia
Restauración histórica de cómo se imaginaron al 'Brontosaurus' a finales de 1800: acuático y con un gran y robusto cráneo. / Artista desconocido (sin derechos de autor)
Una familia de gorilas de montaña de la cordillera volcánica de Virunga en la frontera entre Ruanda, Uganda y República Democrática del Congo. / Gorilla Doctors (UC Davis)
Una expedición de ecólogos y botánicos de la Universidad Rey Juan Carlos, junto a expertos ecuatorianos, han explorado los cerros de Mura Nunka en Ecuador para estudiar su biodiversidad. Esta región tropical alberga un gran número de especies desconocidas por la ciencia y que se encuentran amenazadas por la acción del hombre.
En la década de los 80, el número de gorilas de montaña descendió drásticamente por la destrucción de su hábitat y la caza. Solo quedaron 253 individuos de esta subespecie en la cordillera volcánica de Virunga. Desde entonces, los fuerzos de conservación han aumentado, pero poco se sabía sobre su diversidad genómica y su pasado evolutivo. Ahora, la primera secuenciación del genoma de este gran simio demuestra cómo la endogamia ha sido, de alguna manera, genéticamente beneficiosa para estos gorilas.
El aumento de la emisión de dióxido de carbono desencadenado por varias erupciones volcánicas en Siberia provocó la acidificación de los mares hace 252 millones de años. Un estudio demuestra ahora que esta pudo ser, en una espiral de fenómenos, una de las causas de la extinción masiva entre los períodos Pérmico y Triásico, en la que desaparecieron el 96% de las especies marinas y el 70% de las terrestres.
El calentamiento global, la acidificación y la sobrepesca amenazan a los arrecifes de coral de todo el mundo, hasta el punto que el 83% de 832 arrecifes analizados tienen una biomasa de peces inferior al límite necesario para su supervivencia. Para restaurarlos, un equipo internacional propone restablecer las poblaciones de peces controlando la pesca. Sin embargo, según los cálculos, los más frágiles tardarían unos 60 años en recuperarse aun adoptando estas medidas.
Si en astronomía se destronó a Plutón como planeta, en paleontología también existe otro ‘príncipe’ destronado. Se trata del emblemático brontosaurio, que desde 1903 se clasificaba dentro del grupo de los Apatosaurus, y al que un reciente estudio ha devuelto su categoría de género único.