Un equipo de paleontólogos ha identificado la masacre y el canibalismo de once personas, incluidos niños, en un episodio de violencia ocurrido hace 5.700 años en uno de los yacimientos del célebre enclave arqueológico burgalés.
Herramientas de piedra halladas en Sulawesi, Indonesia, revelan que los primeros homínidos llegaron a esta isla hace más de un millón de años, mucho antes de lo que se creía. El hallazgo plantea nuevas preguntas sobre quiénes eran estos humanos y cómo lograron cruzar aguas profundas.
Un equipo investigador ha utilizado isótopos de oxígeno en el esmalte dental de estos reptiles extintos para estimar los niveles de dióxido de carbono en la Era Mesozoica. Los resultados, publicados en la revista PNAS, indican concentraciones hasta cuatro veces superiores a las preindustriales, y ofrecen una nueva vía para explorar las condiciones climáticas pasadas.
Un diente fósil de reno demuestra que estos robustos animales vivían en Atapuerca hace más de 200 mil años. Su descubrimiento sugiere que convivió con seres humanos primitivos y que los animales pertenecientes a zonas gélidas llegaron a la península ibérica gracias al impacto que tuvieron las glaciaciones sobre el clima.
Los mecanismos moleculares que permiten a los animales que hibernan sobrevivir al frío extremo, el ayuno prolongado o el deterioro metabólico podrían estar latentes en los humanos. Entender estos procesos podría abrir nuevas vías terapéuticas para enfermedades como la diabetes tipo 2 o el alzhéimer.
Un evento evolutivo poco común está detrás del enigmático origen de la patata. Según un nuevo estudio, este tubérculo apareció por hibridación natural entre un ancestro del tomate y una planta silvestre chilena llamada Etuberosum.
Una vértebra infantil hallada en el yacimiento burgalés de Gran Dolina presenta cortes precisos que indican la separación deliberada de la cabeza del cuerpo. Los científicos ven en esta práctica una estrategia recurrente de aprovechamiento de carne humana entre los primeros homínidos que habitaron la zona.
Descubren fósiles de un reptil que vivió hace 247 millones de años con una cresta formada por apéndices similares a plumas, lo que indica que antes de las aves ya existían reptiles con recubrimientos complejos en la piel. El hallazgo refuerza la idea de que la piel de este reino animal era más sofisticada de lo que se pensaba.
Las esponjas que habitan en el Atlántico Norte y el Ártico desempeñan un papel esencial en los ecosistemas marinos profundos, pero su fragilidad frente a las alteraciones humanas las sitúa en una posición vulnerable. Un análisis genético revela los riesgos que enfrentan sus poblaciones.
Investigadores del CENIEH han demostrado que la técnica de microtomografía computarizada, considerada no destructiva, puede deteriorar huesos y dientes fósiles. Con este estudio, advierten a la comunidad científica sobre los riesgos de su uso sistemático.