La ciudad de Nueva York cubierta de humo por incendios a cientos de kilómetros, en Canadá, ha dejado imágenes inéditas de un cielo tóxico anaranjado. Se mantiene la alerta por la calidad del aire y han ardido hectáreas que superan cifras récord. En España conocemos bien el fenómeno de los grandes incendios, que se han adelantado y ya han causado este año estragos en Asturias desde marzo, o en Teruel y Castellón.
La escasez de vegetación en el Paleolítico obligaba a restringir el uso de la madera. Un estudio llevado a cabo en la cueva de Coímbre (Asturias), en el que ha participado la Universidad Complutense de Madrid, ha demostrado que los seres humanos de hace 25.000 años, además de para fabricar herramientas u obras de arte, aprovechaban al máximo los huesos de los animales como combustible para aumentar la durabilidad de sus hogueras.
De todas las regiones de la fachada atlántica, solo en Galicia y norte de Portugal los fuegos son un problema muy grave que irá a más. En los últimos días se ha hablado de incendiarios, terrorismo ambiental y cambio climático; pero esas explicaciones pueden resultar simplistas. Biólogos que llevan décadas estudiando los incendios del norte peninsular identifican las verdaderas razones de esta oleada.
El estudio del ejemplar de esturión capturado de forma accidental en aguas asturianas en noviembre de 2010 revela que se trata de una especie prácticamente inexistente en Europa. El pez –una hembra de más de dos metros y 120 kilogramos de peso– nadaba en solitario y se desconoce su procedencia. Los expertos de la Universidad Complutense de Madrid que han analizado al animal no descartan que provenga de las costas atlánticas de América del Norte y piden que se catalogue como especie en peligro.
Investigadores del Museo Nacional de Ciencias Naturales (MNCN-CSIC) y de la Universidad austriaca de Graz han descubierto un nuevo liquen, Xylographa lagoi. Se trata de una especie endémica de la reserva natural de Muniellos en Asturias, y su nombre es un homenaje a Manuel Lago, antiguo guarda forestal de la reserva asesinado por cazadores furtivos en 1980. El hallazgo aparece en una monografía que revisa el género a nivel mundial.
La relación entre el hombre y el lobo en España ha sido siempre complicada. Una de las problemáticas más extendida es el seguimiento de las manadas. Recientemente, los grupos ecologistas planteaban la necesidad de que se base en criterios más técnicos y objetivos, ante la matanza de cuatro cachorros en Asturias. Científicos españoles han diseñado un nuevo método para hacer un seguimiento más preciso de la población lobuna.
Dos lobos ibéricos en el norte de España. / Francisco Javier Lema
Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas ha analizado 101 retablos barrocos ubicados en 54 iglesias de Galicia y Asturias y ha logrado identificar seis variedades de vid cultivadas en esta zona peninsular.