La medicación, que se tiene que administrar en un plazo de cuatro horas y media desde la aparición de los primeros síntomas, ha resultado ser eficaz para revertir la lesión cerebral en un paciente de 16 años. Un diagnóstico rápido de esta enfermedad es fundamental para minimizar las secuelas en los niños.
Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en mujeres en Europa debido, entre otras cosas, a la falta de concienciación y a la escasa representación femenina en los ensayos clínicos. Esta investigadora se ha puesto al frente de un estudio en el que van a participar 240 voluntarias españolas para promover hábitos saludables y fomentar el uso de las técnicas de imagen en su prevención.
Un nuevo estudio recoge tres únicos episodios de trombosis arterial en dos mujeres y un hombre tras la vacunación con Vaxzevria. Estos efectos son extremadamente raros y mucho menos frecuentes que los ictus isquémicos producidos por la infección por covid-19.
El algoritmo EN-PESA contribuirá a personalizar el riesgo cardiovascular, lo que se traducirá en tratamientos y planes de seguimiento más personalizados. El modelo de aprendizaje automático está basado en variables como la edad, tensión arterial, dieta y marcadores medibles en análisis de sangre y orina.
Un equipo internacional de expertos ha descrito por primera vez los metabolitos que advierten de la aparición de infarto de miocardio e ictus en la población de España y EE UU. El conocimiento adquirido podrá ser útil en el futuro para individualizar mejor la dieta ideal para la prevención de la enfermedad cardiovascular.
Un nuevo estudio muestra que los pacientes hospitalizados con COVID-19 tratados con anticoagulantes tienen un mejor pronóstico vital sin incrementar el riesgo de sangrado. Estos resultados podrían cambiar las guías de tratamiento para prevenir la coagulación asociada con el nuevo coronavirus, una de las principales complicaciones de la enfermedad.
Un estudio publicado en Nature Immunology apunta un nuevo medio de control del sistema inmunitario, localizado en una de sus células más importantes: los neutrófilos. El hallazgo podría tener importantes efectos sobre enfermedades como el infarto de miocardio, el ictus o los procesos inflamatorios agudos.
El síndrome de progeria Hutchinson-Gilford conlleva el desarrollo prematuro de enfermedad cardiovascular y muerte precoz. Un nuevo estudio ha identificado una posible terapia con un fármaco que inhibe la progresión de la patología vascular y prolonga la supervivencia en ratones progeroides.
Los pacientes con unas determinadas variantes en el gen PATJ tienen menos capacidad de recuperarse después de sufrir un ictus, como concluye el primer estudio multicéntrico realizado en este campo. Siete de cada diez pacientes que presentan esta variación en el material genético quedan con secuelas graves tres meses después de sufrir un infarto cerebral, ante menos de la mitad en caso de no presentar esta variación.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han liderado un trabajo que consigue la recuperación funcional de ratones con ictus cerebral tras implantarles células madre encapsuladas en hidrogeles de fibroína de la seda. Tras el tratamiento, los roedores experimentaron una mejoría significativa de sus capacidades sensoriales y motoras.