Más ligero que un agujero negro, pero más pesado que una estrella de neutrones. Así es el misterioso objeto que se ha fusionado con una de estas estrellas, según la onda gravitacional registrada por los detectores de la colaboración LIGO-Virgo-KAGRA, en la que participa la Universidad de las Islas Baleares. El anuncio coincide con la reanudación de las operaciones de detección de este equipo internacional.
La Agencia Espacial Europea (ESA) ha aprobado la misión LISA, una constelación de tres naves para captar las ondas del espacio-tiempo que predijo Einstein. Estarán equipadas con cubos de oro y platino junto a tecnología láser, se construirán a partir de 2025 y se lanzarán una década después.
Mediante derivadas en lugar de integrales, investigadores de España y China han encontrado una forma más sencilla de resolver complejos cálculos que se utilizan para obtener información sobre ondas gravitacionales, como las que detectan los experimentos LIGO y Virgo. El nuevo enfoque permite conocer con mayor precisión y seguridad las características de estos impactantes fenómenos cosmológicos.
Tras utilizar los púlsares de nuestra galaxia como relojes cósmicos, la colaboración internacional NANOGrav ha 'escuchado' el coro de las más potentes ondas gravitacionales conocidas, que distorsionan el espacio-tiempo al atravesar todo lo que existe. El sonido procede de las interacciones de colosales agujeros negros supermasivos.
Al norte de Argentina, a casi 5000 metros de altura, nuevas ‘ventanas’ se abren para descifrar los misterios del universo. La última es un observatorio cosmológico internacional, que ya rastrea las huellas de la furiosa expansión cósmica ocurrida una fracción de segundo después del Big Bang.
La colaboración LIGO-Virgo-KAGRA, en la que participa la Universidad de las Islas Baleares y otros centros españoles, ha detectado 35 nuevos eventos de ondas gravitacionales: 32 probablemente por fusiones de agujeros negros, dos por colisión entre estrellas de neutrones y agujeros negros, y finalmente uno más raro que intriga a los científicos.
Cerca de un millar de físicos y físicas de todo el mundo han presentado esta semana los últimos resultados sobre la búsqueda de materia y energía oscuras, ondas gravitacionales, neutrinos y otras astropartículas. Entre ellos, la cosmóloga italiana Licia Verde explica cómo avanzan las investigaciones y los experimentos más punteros sobre nuestro universo.
Los detectores Virgo en Europa y LIGO en Estados Unidos han registrado por primera vez ondas gravitacionales generadas por el llamado ‘sistema binario perdido’: una combinación de estrella de neutrones y agujero negro. Los dos eventos observados se denominan GW200105 y GW200115 por las fechas en las que se detectaron: 5 y 15 de enero de 2020.
Los detectores Virgo y LIGO de ondas gravitacionales registraron 39 eventos entre abril y octubre de 2019. Estas numerosas observaciones se corresponden con colisiones de agujeros negros o estrellas de neutrones y abren la puerta a nuevos estudios sobre poblaciones de objetos astrofísicos y de física fundamental.
Cerca de 40 instituciones europeas, ocho de ellas españolas, han solicitado incorporar el Einstein Telescope en la próxima hoja de ruta del Foro Estratégico Europeo para Infraestructuras de Investigación (ESFRI). Este observatorio terrestre de ondas gravitacionales de tercera generación podría ubicarse en la frontera entre Bélgica, Alemania y Países Bajos, o bien en la isla italiana de Cerdeña.